La concejala del Gurpo Mixto del Ayuntamiento, Carmen Díez durante la mañana de este jueves ha efectuado una denuncia sobre los escudos franquistas que albergará el futuro Centro Internacional del Español (antigua sede del Banco de España) en la Plaza de los Bandos.
Díez ha explicado que "esto viene precedido porque el año pasado en Julio ya se pidió a las tres administraciones (Ministerio de Cultura, USAL y la Junta de Castilla y León) que tomaran una decisión y hasta ahora no se nos ha dado prácticamente ninguna respuesta. En breve va a estar terminada la obra sin que estos escudos estén retirados".
Por otro lado, la concejala del Grupo Mixto en el Ayuntamiento ha manifestado que el edificio fue construido en 1940 y que la ley vigente actual expone que "los escudos franquistas tienen que ser retirados".
"Desde nuesto punto de vista las tres administraciones incumplidoras son el Ministerio de Cultura a quien perteneció el edificio hasta 2016, la USAL porque obstenta actualmente desde 2016 el inmueble y ha hecho las obras de rehabilitación y no ha retirado los escudos y por último la Junta de Castilla y León ya que fue quien encargó el proyecto y quien pagó la reforma. La Junta de Castilla y León al encargar la construcción, debería de haber tenido en cuenta que la ley obligaba a quitar estos escudos", declara Díez.
Del mismo modo, Carmen Díez afirma que "la USAL se comprometió en 2017 a eliminar la simbología franquista en dos de sus sedes, una de ellas fue la Facultad de Ciencias Agrarias y otra este centro, por otra parte, declara que "se ha hablado en nombre de la Universidad de Salamanca de resignificar los escudos, una opción que parece que ha tomado la Universidad, pero a la que hay que recordarle que en estos momentos la ley establece que esto no está vigente aún, por lo tanto no seria lo legal, lo lícito ahora mismo es pedir la retirada que es lo que hemos hecho nosotros".
Por último, revela que "todavía estamos a tiempo y además en lo legal de pedir la retirada de esos escudos o que se busque una forma de manera que los símbolos no estén a la vista de todo el mundo y que se tenga en cuenta el entorno en el que se sitúa".