El ciberacoso, el acceso a contenidos inapropiados para menores y el uso excesivo de Internet son los principales peligros a los que se enfrentan los niños y los adolescentes en la Red, no sólo en Salamanca, sino que estos problemas son comunes en España. Así lo ha señalado a SALAMANCA24HORAS Cristina Gutiérrez, experta en menores del Centro de Seguridad en Internet para menores, ‘Internet Segura for Kids’ (IS4K) que tiene por objetivo la promoción del uso seguro y responsable de Internet y las nuevas tecnologías entre los niños y adolescentes.
Según ha detallado Gutiérrez, de las consultas recibidas a través de la línea de ayuda del centro, una de cada cuatro se refiere al uso excesivo de Internet y de las nuevas tecnologías y los problemas derivados de esa situación de dependencia, mientras que el 21% de las consultas tienen que ver con solicitud de asesoramiento y alrededor de un 16% de las mismas son sobre ciberacoso.
Cristina Gutiérrez ha señalado que, por un lado, los menores se enfrentan a riesgos en Internet relacionados con la privacidad de la información que muestran, así como con la configuración de esa privacidad, y ha insistido en la importancia de “saber a quién tenemos que mostrar la información”.
Asimismo, ha subrayado los riesgos técnicos derivados de la conexión, como los virus o los malwares o programas maliciosos, ya que “los menores son muy susceptibles a pinchar en ofertas o en cualquier noticia morbosa” por curiosidad, que les lleva a cupones de descuento o mejoras de videojuegos y las descargan, pudiendo subscribirse así, sin querer, a servicios premium con un coste económico.
Del mismo modo, según la experta en menores, también se producen conductas de riesgo en la Red que tienen que ver con las relaciones que se entablan con otros. En este sentido, se ha referido al problema del sexting, que se da cuando se comparte imágenes o vídeos “en actitud picante” con una pareja y que, cuando se rompen, la otra persona se enfada y “esas fotos acaban en manos de todo el mundo”. Ligado, precisamente al sexting, ha recalcado el problema del ciberacoso, que llega cuando esas fotos se convierten en motivo de burlas y humillaciones que “traspasan las fronteras de un aula o un centro educativo y se convierten en un acoso las 24 horas del día en cualquier plataforma y en cualquier momento”, ocasionando “situaciones que generan mucho daño emocional en los menores”.
Por último, Gutiérrez, ha destacado el riesgo de contactar con personas que no son lo que dicen ser. “A veces son adultos que intentan extorsionar o sextorsionar a esos menores”, ha recalcado.
“Todo eso son circunstancias que lamentablemente se dan hoy en día”, ha lamentado Cristina Gutiérrez, quien ha explicado que desde IS4K “tratamos de promover el uso en positivo de Internet alejándonos de un discurso más alarmista e inculcarles a los jóvenes que deben desarrollar un pensamiento crítico, que no se tienen que fiar, ya que es la mejor forma de utilizar de manera segura Internet”.
No hay una edad mínima para utilizar Internet
Por otro lado, Cristina Gutiérrez ha detallado que, en su opinión, el acceso a Internet y a las nuevas tecnologías no tiene tanto que ver con una edad mínima sino con el grado de madurez de la persona y su situación en casa.
Tal y como ha reconocido, es una cuestión que suscita muchas opiniones al respecto y hay expertos que no recomiendan el acceso a Internet antes de una determinada edad, “pero nosotros, más que dar una edad de inicio, recomendamos que cada familia tienen que adaptar las recomendaciones a la realidad de su hogar y pensar en la madurez del menor, en cómo se enfrenta a las situaciones”.
En este sentido, ha recomendado que los padres establezcan límites en el uso de Internet y las nuevas tecnologías a sus hijos y vean cómo responden a esas pautas. “Los padres deben delimitar las horas y seleccionar los contenidos apropiados para el menor”, ha recalcado y ha subrayado que, a medida que los menores van creciendo, el rol de acompañamiento deja de ser tan activo. “El menor debe ganar intimidad, pero siempre a cambio de responsabilidad”, ha concluido.