La concejala Virginia Carrera defenderá en el próximo pleno el cierre inmediato de las casas de apuestas durante el nivel de alerta 4, vigente en Salamanca

Su segunda moción buscará la remunicipalización o reinternalización de los servicios públicos externalizados

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 CASAS DE APUESTAS (20 02 2020)16
CASAS DE APUESTAS (20 02 2020)16

La primera moción tiene como objetivo que el Ayuntamiento de Salamanca exija a la Junta de Castilla y León el cierre de  los salones de juego y casas de apuestas, evitando así que se conviertan en una alternativa de ocio durante este periodo excepcional de emergencia.

Con la declaración del nivel de alerta 4, la Junta de Castilla y León adoptó una serie de medidas sanitarias preventivas  como suspender todas las actividades de restauración, tanto en interiores como en terrazas o suspender la apertura al público de instalaciones deportivas convencionales y centros deportivos para la realización de actividad física que no sean al aire libre.

Sin embargo, nos encontramos una realidad desdibujada al conocer que los y las jóvenes de nuestra Comunidad, no pueden quedar para “echar una pachanga” o para tomar una caña en un establecimiento hostelero, pero sin embargo se les permite ir a los salones de juego y casas de apuestas a tomarse una caña y a apostar en aquellos deportes que la Junta ya ni siquiera les deja practicar.

La segunda moción presentada por Carrera, la remunicipalización o reinternalización  de los servicios públicos externalizados. Son muchos los municipios que están tomando medidas para remunicipalizar o reinternalizar  servicios públicos gestionados por empresas privadas, en los que se ha estado anteponiendo el beneficio empresarial a la calidad del servicio prestado. La mayor parte de los servicios esenciales que se prestan desde muchos ayuntamientos están privatizados como consecuencia de decisiones políticas.

Izquierda Unida apuesta por la gestión directa de los servicios e instalaciones públicas municipales y considera que es más eficiente, más transparente, más barata, más democrática e incluso más beneficiosa para los ciudadanos y ciudadanas. Esta modalidad, asegura mejor control y dirección del servicio que se presta, al eliminar intermediarios y ser el personal municipal responsable directo de su calidad y de la correcta prestación del mismo; así como de la aplicación de medidas urgentes par su mejora en caso de ser necesarias.

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