La congelación de óvulos, una técnica "sencilla y asequible" por la que las salmantinas se ven 'obligadas' a trasladarse a Valladolid

María Lourdes Hernández, especialista en Ginecología del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA), solicita apoyo institucional para que Salamanca progrese en este campo y que las pacientes no tengan que trasladarse al Hospital Río Hortega

Foto de archivo del Hospital Universitario de Salamanca
Foto de archivo del Hospital Universitario de Salamanca

La decisión de ser madre cada vez se retrasa más. La franja de edad mayoritaria para tener hijos en Salamanca, según los datos del mes de enero de 2023 aportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), es de los 30 a los 39 años. “Lo ideal es que la mujer se quede embarazada antes de los 35, ya que la capacidad que tiene de quedarse es mayor y disminuye también la posibilidad de que sus hijos tengan alteraciones cromosómicas (como el síndrome de Down). Además, tienen menos posibilidades de que su parto se complique”, manifiesta María Lourdes Hernández, especialista en Ginecología del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA).

María Lourdes Hernández, ginecóloga del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca
María Lourdes Hernández, ginecóloga del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca

Condiciones laborales y sociales son las razones principales por las que las españolas retrasan la maternidad. En este sentido, Hernández apunta que “las políticas sociales no ayudan a una estabilidad laboral”, indicando también que el número de óvulos sufre un descenso “muy marcado” a partir de los 35 años. Por este motivo, muchas deciden confiar en la preservación de óvulos y, así, asegurarse el embarazo en un futuro. 

Respecto a la congelación de óvulos, la especialista explica que puede ser por causa social en aquellas mujeres sanas que quieren posponer su maternidad (bien por no tener pareja, o por no tener estabilidad laboral, etc); o por motivos médicos, especialmente por causa oncológica. Del mismo modo, asegura que la sanidad pública en España únicamente costea la preservación oncológica en aquellas pacientes de menos de 40 años, con buena reserva ovárica a las que se les diagnostica un cáncer. En estos casos expone que el proceso ha de ser “rápido y previo al inicio de tratamiento de quimioterapia”. Para el resto de personas añade que “la preservación social no entra en la cartera de servicios de la sanidad pública, y solo se puede realizar en la medicina privada”. Igualmente, indica que su coste depende de cada clínica y varía entre los 2500 y 3500 euros.

Unidad de Reproducción Asistida en el Hospital de Salamanca

Las técnicas de reproducción asistida, como la fecundación in vitro o la congelación de óvulos no pueden llevarse a cabo actualmente en el Hospital de la capital del Tormes. "Alrededor de 200 parejas son derivadas anualmente a los dos hospitales públicos de Valladolid para que se les realice uno de los tratamientos en cuestión por un motivo oncológico o para ser madres sin pareja", afirma Hernández, quien también denuncia en la entrevista a Salamanca24horas que se ha solicitado en varias ocasiones una Unidad de Reproducción Asistida en el CAUSA, pero que, finalmente, "no se ha tenido en cuenta". 

Cabe recordar que, tanto la fecundación in vitro como la congelación de óvulos, son procedimientos que se llevan realizando desde hace más de cuarenta años. Según apunta la ginecóloga, el coste económico de poder realizarlos para un hospital de la categoría del de Salamanca no sería "muy alto", puesto que manifiesta que el centro dispone de profesionales que tienen una capacitación conocida para desarrollarlo. "Son técnicas sencillas y asequibles no comparables a procedimientos como los trasplantes, en los que se entiende que han de centralizarse en un único hospital al ser procesos complejos", subraya.

Asimismo, Hernández solicita apoyo institucional para que Salamanca progrese en este campo y que las pacientes no tengan que trasladarse al Hospital Río Hortega de Valladolid, con lo que supone para ellas y sus familias, puesto que recalca que la duración del tratamiento es de diez a doce días.

"Acabamos de inaugurar un hospital nuevo con muchas innovaciones tecnológicas y que quiere ser puntero, pero que se ha olvidado de favorecer a las mujeres salmantinas que tienen dificultades para tener hijos", lamenta Hernández.

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