La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha emitido un comunicado para reclamar medidas urgentes con el objetivo de facilitar las bajas laborales por COVID y aliviar la carga de trabajo a los médicos. Esta medida ha sido reclamada después de que se haya conocido que la Atención Primaria ha pasado del colapso a la caída libre por la falta de personal. El médico no puede dedicar apenas tiempo a los pacientes y la burocratización de la gestión de la incapacidad temporal (bajas y altas) por COVID se ha disparado, obligando al facultativo a priorizar la gestión de las bajas laborales. “Se ha pasado de resolver problemas clínicos, valorando directamente al paciente, a ser meros gestores de bajas de contagios”, lamenta CSIF.
Ante esta insostenible situación, “es necesario agilizar la gestión de las bajas laborales por COVID, descongestionando y derivando este trámite a otros organismos, como pueda ser el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), mutuas de trabajo o médicos de empresa, en un único parte de alta/baja de siete días de duración”, considera CSIF. De esta manera, no sería necesario un justificante médico, tal y como ocurre en otros países de la Unión Europea. Así se tramitarían las bajas de oficio, una vez comunicado el resultado positivo del test autodiagnóstico de antígenos por parte del paciente a Salud Pública.
La saturación actual podría y debería aliviarse estableciendo un mecanismo a nivel nacional, por el que los facultativos tramitaran simultáneamente los partes de baja y de alta en un único acto médico. Al no tener que contactar nuevamente el contagiado con su médico de Atención Primaria, se aligeraría la burocratización a la que están sometidos los médicos. CSIF ha destacado que no se puede sobrecargar más a los profesionales sanitarios y, por tanto, ha exigido que se lleven a cabo trámites burocráticos, paralizando el resto de la atención sanitaria no COVID.
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