David, joven con síndrome de Asperger: “Animo a la sociedad a que en vez de prejuzgar, nos conozca. Somos gente noble, fiel y respetuosa”

Este sábado se celebra el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, momento que tanto la Asociación Síndrome de Asperger como la Asociación ARIADNA aprovechan para informar y continuar visibilizando al colectivo

David, joven de 22 años usuario de la Asociación Síndrome de Asperger Salamanca y Lorena Alonso, psicóloga especializada en autismo
David, joven de 22 años usuario de la Asociación Síndrome de Asperger Salamanca y Lorena Alonso, psicóloga especializada en autismo

“Tener Asperger es como si vamos a otro país con otro idioma y otras culturas. Nos costaría entender las cosas al principio, pero podemos acostumbrarnos”. Breve, concisa y sencilla es la descripción que José Manuel Bermejo emplea para explicar la conducta de las personas con asperger o TEA (Trastorno del Espectro Autista). Bermejo es trabajador social desde hace cuatro años en la Asociación Síndrome de Asperger de Salamanca y, desde allí, tiende la mano a un total de 70 familias, entre las que se encuentra la de David.

Como cualquier joven de Salamanca de 22 años, David cuenta con unas aficiones y cursa unos estudios para dedicarse a su profesión soñada en un futuro. Él mismo cuenta que le gusta el ciclismo, la natación y la electricidad. Sobre todo esto último, lo que coincide y se complementa con la formación que está adquiriendo en el grado superior en Sistemas Electrotécnicos y Automatizados. Entonces, ¿qué le diferencia del resto de chicos? David tiene Asperger y, si algo lo diferencia de manera más llamativa, es el interés extremo que tiene sobre la electricidad y las dificultades de comunicación a las que se enfrenta respecto a los "neurotípicos" -como denominan las personas con TEA a la gente "normal", aunque como reconoce David "no hay nadie normal en este mundo"-.

Al igual que él, muchas personas con Asperger cuentan con un tema sobre el que centran su atención, aunque en ocasiones no es así. De este modo lo expone Lorena Alonso, psicóloga especializada en autismo en la Asociación, de la que forma parte desde hace nueve años. Como ella explica, a pesar de que todos los usuarios tienen en común las dificultades en las habilidades sociales, cada uno es diferente y arrastra una historia.

La sociedad se encuentra avanzando en lo que a diagnóstico precoz y atención temprana se refiere, pero todavía cuenta con numerosos lastres que hacen tropezar a las personas con Asperger. “Algunos profesores, no todos, me veían como un chico que no se expresaba. Me pasó con la profesora de lengua del instituto, que a pesar de haber aprobado me suspendió porque dijo que no sabía expresarme bien”, declara David a modo de ejemplo.

Es ahí, en la falta de concienciación donde todavía se ha de insistir. Es importante, según explica Alonso, que los profesores en los colegios y demás centros educativos conozcan el espectro y puedan dar la “voz de alarma” para que los especialistas posteriormente puedan intervenir, además de adoptar medidas para facilitar la educación de estos alumnos. En este sentido, se está avanzando porque además de los maestros, los pediatras y médicos de atención primaria son conscientes antes de cuándo una persona puede ser Asperger. “Esto es algo que antes no pasaba”, celebra la psicóloga.

Pero no todo termina cuando una persona, en especial niño, es diagnosticado con Asperger. “El diagnóstico conlleva para los padres una gran carga emocional”, confiesa Bermejo. El trabajador social reconoce que “una vez se pone nombre” al comportamiento de los niños, muchos padres tienen miedo. Miedo de que manden a su hijo al Colegio de Educación Especial Reina Sofía sin necesitarlo o que sufra acoso en su clase son los más comunes. Pero Bermejo lo deja claro, y es que los especialistas están ahí para ayudarlos. “Antes iban dando a diferentes teclas, iban tirando de hilos, y nosotros les damos un mapa con su brújula”, explica.

“Animo a la sociedad a que en vez de prejuzgar, nos conozca. Somos gente noble, fiel y respetuosa”

Entre el 60 y el 70 por ciento de personas con Asperger se han enfrentado a acoso tanto escolar como laboral. “Yo lo pasé especialmente mal en secundaria porque la gente no te entiende. Aún sigo sin superar esa etapa”, confiesa David. Esta cifra y esta declaración ponen de manifiesto la falta de sensibilidad por parte de los “neurotípicos”, tanto en el ámbito educativo como laboral.

En este sentido, Bermejo, el trabajador social comenta que se trabaja mucho con las empresas para lograr la integración de las personas con Asperger. “Imagina lo complicado que es enfrentarse a una entrevista, por el uso del lenguaje gestual, intentar convencer al entrevistador de que eres el candidato adecuado”, introduce Bermejo. No obstante, una vez que pasan a formar parte de la plantilla, es altamente probable que desarrollen su tarea correctamente. “Hay que tener en cuenta que las personas Asperger seguramente se dediquen a aquello por lo que tienen todo el interés, por lo que conocen perfectamente la materia. A veces nos centramos en las dificultades, pero hay que poner en valor las capacidades”, expone.

David, siendo consciente de los comportamientos que hacen de su conducta diferente al resto, manda un mensaje a la sociedad: “Animo a la sociedad a que en vez de prejuzgar, nos conozca. Somos gente noble, fiel y respetuosa. Por ser más diferente al resto, no significa que vayamos a comer a nadie”. En las empresas o en los centros educativos, a pesar de que no sea “su función”, deberían pensar “conozco a este chico que le gustan más las cosas, voy a intentar ayudar, llevarme con él”, manifiesta David.

David y Lorena durante una de sus sesiones de terapia
David y Lorena durante una de sus sesiones de terapia

Petición de apoyo a la administración pública

La Asociación Síndrome de Asperger abrió sus puertas en 2009. Como la mayoría de las asociaciones, comenzó con pocas familias que tenían en común a uno de sus miembros con TEA. El equipo de profesionales lo formaban un psicólogo y una persona que se encargaba de desarrollar las actividades y, poco a poco, comenzó a crecer tanto en el número de usuarios como en el número de profesionales. No obstante, como reconoce Bermejo, el número de profesionales se queda corto para las necesidades de los 70 usuarios (y los que se unirán) que forman parte de la Asociación actualmente.

Las instalaciones donde desarrollan las actividades se ubican en ‘La Casa de las Asociaciones’ del Ayuntamiento de Salamanca. En el edificio cuentan con varias salas en las que ofrecer terapia y actividades para el desarrollo de habilidades sociales básicas, pero “se queda corto”. El trabajador social reconoce que a pesar de contar con este espacio, “voy a solicitar dos pisos tutelados” donde poder incentivar “la autonomía personal”. “Muchos de nuestros chicos están entrando en una edad en la que tienen que ir trabajando su autonomía, aprender en la gestión de conflictos, limpieza o higiene personal y en un piso podrían ponerlo en práctica en el propio contexto”, explica Bermejo. De este modo, “podríamos trabajar y decidir qué chicos están preparados para vivir en un piso con otros compañeros”. El primer piso tendría este fin, y el segundo tendría la función de “piso piloto” donde convivieran los chicos y un educador “pudiera supervisar su comportamiento por si surgiera algún problema”.

“Reclamamos el derecho de las personas con autismo a vivir una vida plena y feliz”

Este sábado, 2 de abril, se celebra el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo. A través de la campaña “Un feliz viaje por la vida”, las diferentes Asociaciones de Personas con Autismo de España, incluida la salmantina ARIADNA, continúan reclamando el derecho de las personas con este diagnóstico a “vivir una vida plena y feliz”.

La presidenta de ARIADNA, Carmen Calvo, reconoce la calidad de vida en los últimos años de estas personas pero recalca el gran coste de las plazas en los centros especialmente de adultos. “Cuanto más somos en la Asociación, más nos empobrecemos”, explica Calvo.

Así mismo, la presidenta aprovecha la celebración del Día Mundial de la Concienciación para “reivindicar que no se infantilice a las personas con autismo. No es una enfermedad, es una condición y cada persona es diferente”, explica.

Con motivo de este 2 de abril, la Asociación ARIDNA ha organizado una jornada llena de actividades. A las 17:00 horas está programada la lectura del manifiesto en la plaza de la Concordia y, posteriormente, los participantes podrán disfrutar de una tarde de celebración.

Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios

Lo más leído