Denuncian que la externalización a la privada de pruebas médicas en Salamanca indica falta de planificación

FEVESA ha emitido un comunicado en el que muestran su descontento ante la realización de resonancias y ecografías musculoesqueléticas

Resonancia
Resonancia

La Federación de Vecinos de Salamanca ha hecho pública una denuncia en cuanto a la realización de pruebas médicas para los habitantes de la capital del Tormes y del resto de la provincia de Salamanca. El pasado 10 de abril se celebraba el Consejo de Salud de Área en donde se exponía que los diferentes controles sanitarios estaban en los primeros puestos de Castilla y León. 

Ante esto, FEVESA ha sido muy crítico y ha explicado que “habría que saber cuándo se realiza la encuesta, si mientras esperan en las interminables listas de espera o una vez resuelto su problema de salud, aquellos que lleguen a tiempo”. Dos tipos de pruebas son las que han destacado, por un lado las ecografías musculoesqueléticas, y por otro lado las pruebas diagnósticas de resonancia magnética. 

Han hecho hincapié en que, en el programa HIFU, se han querido reducir listas de espera, pero que esto se debe a que “se dejarían de realizar 700 estudios anuales menos”. Además, han añadido que el equipo de resonancia magnética está averiado y que “habría que analizar si está llegando a su vida útil, por lo que un buen gestor tendría que estar atento para no tener que prescindir de un recurso que haría incrementar las listas de espera aún más. No obstante decir que, el aparato mencionado ya se encuentra arreglado y de nuevo en funcionamiento. La pérdida y no reposición del aparato, parece que provocaría el dejar de realizar 1080 estudios al año. De nuevo se pone de manifiesto la mala gestión o la excusa para externalizar las pruebas diagnósticas”.

Asimismo, en cuanto a la recogida de documentos, han querido exponer que “falta personal” y que deberíamos fijarnos en otras provincias como León y Valladolid en donde “si está desarrollando actividad programada en jornada nocturna hasta las dos de la madrugada. Para ello han contratado personal extra pagado teniendo en cuenta el turno nocturno, pues la retribución nunca puede ser la correspondiente al diurno. Este asunto siempre ha de estar negociado con los representantes legales de estos trabajadores y no intentar negociar trabajador a trabajador”.

El hecho de externalizar, también, las ecografías musculoesqueléticas, que se han visto incrementada en un 73 por ciento entre 2022 y 2024, “ha dejado patente la mala gestión, sin que nadie de un golpe sobre la mesa o se cese a quien corresponda, salvo que el objetivo, una vez más no sean más que meras excusas buscadas y creadas para sacar la actividad fuera y dar a ganar a empresa externa, vaciando presupuesto de las arcas”.

Por su parte, desde el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA) responden que este tiene un fuerte compromiso centrado en garantizar la accesibilidad, la equidad y la calidad en la asistencia sanitaria, con los pacientes en el centro del sistema. Desde la Gerencia del Hospital Universitario de Salamanca aclaran que la externalización responde a criterios de accesibilidad asistencial, destinados reducir demoras y asegurar tiempos de respuesta adecuados para los pacientes, especialmente en áreas de alta demanda. También que la medida se adopta dentro del marco legal vigente, y está amparada por la Ley de Contratos del Sector Público, con total transparencia y conforme a criterios técnicos y clínicos objetivos.

El Hospital Universitario de Salamanca se encuentra inmerso en un proceso de modernización tecnológica que conlleva la implementación de nuevos equipos avanzados. Esta situación requiere fases de instalación, calibración y formación del personal, afectando temporalmente la disponibilidad de recursos diagnósticos internos. La colaboración con recursos externos es complementaria a la actividad habitual del Hospital, se realiza de manera limitada, controlada y justificada, y es supervisada por el servicio de Radiología del Hospital Universitario de Salamanca. Esta medida supone una solución temporal y estratégica para mantener la calidad asistencial.

Esta decisión se enmarca dentro de un compromiso firme con la sanidad

pública, la equidad en el acceso y la eficiencia en la gestión, bajo principios de

ética, legalidad y responsabilidad institucional.

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