Se ha registrado un aumento de casos de ojo seco en las consultas de oftalmología del último semestre debido al "incremento del uso de pantallas durante la pandemia, tanto por el teletrabajo como por un aumento del tiempo de ocio que hemos pasado en casa", según han indicado en un comunicado oftalmólogos.
Además de esta exposición a las pantallas, los expertos aseguran que también influye el uso de las mascarillas "que dirige nuestra exhalación hacia el ojo, favoreciendo su desecación".
"Es la patología oftalmológica más frecuente en este momento; se trata de una enfermedad en la mayoría de los casos banal, pero crónica y muy molesta para el paciente, que motiva muchas consultas en busca del tratamiento curativo, a día de hoy sólo disponemos de tratamientos sintomáticos", han concluido.
Respecto a los factores, además de las pantallas que influyen en la aparición del ojo seco, como la humedad ambiente, modificada por los aires acondicionados y las calefacciones de aire, también están los factores hormonales, actividad de fijación visual como la lectura, las medicaciones antidepresivas o neurolépticas y algunas patologías reumáticas también se asocian al ojo seco, tal y como han destacado.
Así, al tratarse de una patología crónica, que cursará a brotes en función de los factores exógenos, la prevención se basa en evitar el uso excesivo de pantallas electrónicas, de aires acondicionados o calefacciones de aire en lo posible. Por último, ha añadido que el tratamiento es siempre sustitutivo con lágrimas artificiales de diferente densidad según la gravedad del cuadro.
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