Un helicóptero del SACYL y otros tres de extinción de incendios en huelga indefinida en Salamanca
La ausencia de mejoras salariales, saber el calendario laboral de forma temprana o la pérdida de poder adquisitivo han llevado a movilizarse al personal
Los trabajadores de las empresas Avincis y Pegasus han convocado huelgas a nivel nacional en pro de mejorar sus condiciones laborales, algo que afecta directamente a Salamanca donde la primera de las empresas tiene un helicóptero del SACYL, con base en Matacán, y la segunda otros tres dedicados a la extinción de incendios, siendo la empresa con más medios aéreos de este tipo de todo el territorio nacional.
Avincis lleva en huelga desde el 1 de julio, pero a pesar de ello, han tenido que operar al cien por ciento debido a que tienen que seguir prestando esos servicios mínimos, que en este caso serían todos. Asimismo, Enrique Durán, secretario del Sindicato Libre de Trabajadores Aéreos, ha explicado a SALAMANCA24HORAS que “es el vehículo aéreo que más servicios presta de todo Castilla y León”, por lo que la carga laboral es mayor que en otras provincias.
Pegasus tiene la mayoría de los helicópteros de la región, y llevan en un bloqueo de las negociaciones entre sindicato y empresa desde el 31 de diciembre de 2024, donde se han roto de forma unilateral por parte de PEGASUS, según explica el secretario de SLTA.
En ambas empresas, las quejas han sido similares, donde los propios empleados desconocen apenas días antes cuál será el calendario del mes siguiente, no pueden disfrutar sus ocho días libres al mes que estipula la propia legislación española, no pueden conciliar vida familiar y laboral, o incluso con congelaciones salariales desde hace diez años como es en el caso de Avincis.
Del mismo modo, el propio Enrique ha dejado claro que “una cosa es trabajar para servicios de emergencias, y otra cosa es convertir nuestra vida en una emergencia”, por lo que hasta que se negocie, seguirán en huelga indefinida. En el caso de Pegasus comenzará el próximo 20 de agosto para así poder negociar “la pérdida de poder adquisitivo, además de poder llegar a tener el derecho de desconectar digitalmente o que no tengamos que alojarnos, en caso de una emergencia, a 40 o 50 kilómetros del lugar, como es en el caso de Pegasus”.
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