Los hosteleros quieren implantar un sello de calidad "para vender una Salamanca sana” y atraer turismo cuando acabe la cuarentena

La Asociación de Empresarios de Hostelería, que preside Álvaro Juanes, apuesta por un código QR para acceder a los establecimientos, dependiendo de la situación inmunológica del cliente

 Terrazas
Terrazas

La pandemia del coronavirus ha coincidido con los meses en los que el sector hostelero registraba una mayor actividad. Graduaciones, bodas, comuniones y Semana Santa llenaban hoteles cada fin de semana, con restaurantes y locales de ocio nocturno a rebosar. Con gran parte de la temporada perdida, la paralización completa supone un duro revés para un sector que afronta el futuro a corto plazo con incertidumbre.

De un día para otro, centenares de negocios han tenido que echar el candado a unos establecimientos que no saben, en el mejor de los casos, cuándo y cómo abrirán y, en otros, si podrán hacerlo tras, al menos, seis semanas parados. Con 15 días de inactividad en marzo por la declaración del estado de alarma, dos de cada tres trabajadores que perdieron su empleo en Salamanca pertenecían al sector servicios. Una cifra que empeorará en abril, otro mes con los establecimientos de hostelería cerrados.

Alvaro juanes

“El momento es complicado, pero hay que mantener la serenidad”. Álvaro Juanes, presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Salamanca, analiza la situación por la que pasa un sector que genera 35.000 puestos de trabajo.

¿Cómo están los ánimos en el sector hostelero?

Personalmente, con optimismo, con serenidad, es la única actitud. La situación es grave, estamos preocupados, pero expectantes por ver cómo avanza la pandemia, que será lo que nos marque las aperturas y las líneas de actuación. La asociación está trabajando con varias hojas de ruta para una próxima apertura y reivindicando las necesidades del sector, necesitamos apoyo.

El cierre ha coincidido en el momento que comienza la temporada alta para la hostelería.

Es un momento clave para nosotros, muy potente. Coincide Semana Santa con graduaciones, bodas y comuniones. Nos repercute de una manera muy fuerte porque es temporada alta, aforo máximo.

Seis semanas sin ingresos, pero con gastos a los que hay que hacer frente.

Con actividad nula, los gastos son los mismos. Sí es cierto que casi todos los compañeros han hecho un ERTE, pero están los gastos de suministros de meses anteriores que se cargan este mes, seguros sociales, alquileres, compromisos financieros…la situación es grave, muy comprometida, complicada.

¿Qué medidas barajan aplicar cuando se recupere la actividad?  

Estamos estudiando diferentes propuestas para trabajar con big data, con nuevas tecnologías y con inteligencia artificial con un objetivo fundamental: vender una Salamanca sana. La asociación quiere implantar un sello de calidad para cuando podamos retomar la actividad, de manera que permita garantizar la sanidad. Un sello que implique la formación de trabajadores y empresarios, protocolos sanitarios incluyendo material de seguridad, tratamiento del menaje o desinfección, incluso test de COVID-19 para los trabajadores, o control de temperatura. A lo que se sumarán los controles de aforos que nos irán marcando las autoridades. Todas estas medidas serán las que permita relanzar de nuevo la actividad hostelera. También habrá que realizar campañas publicitarias generales contando también con el respaldo de las instituciones. Necesitamos vender la imagen de una Salamanca sana para atraer turistas, para atraer especialmente mercado nacional, ahora mismo el que tiene más posibilidades.

¿Cómo se puede recuperar turismo?

Hay que volver a recuperar la imagen que teníamos, demostrar que estamos sanos. Para ello es fundamental que se puedan realizar test de COVID-19 masivos y aplicar big data. A la asociación le gustaría poner en marcha un sistema de código QR, una especie de pasaporte para que, una vez que se realicen los test masivos a la población, haya un código de acceso a los establecimientos, dependiendo de la situación inmunológica del cliente. Un código QR que también puede aportar información sobre si esa persona procede de una zona de riesgo o dónde ha estado los últimos 14 días. Puede ser una app que cualquier persona lleve en su móvil.

¿Qué pide el sector a las administraciones para paliar daños y retomar la actividad?

Hay que intentar atraer el turismo nacional y el extranjero, siempre que se pueda y quiera volver, vendiendo una España sana que pasa por test masivos con este código QR y controles exhaustivos y campañas promocionales junto a las instituciones para contrarrestar este golpe económico. Necesitamos apoyo directo, especialmente del Gobierno central, con subvenciones directas, legislación, ERTEs, fórmulas para mantener el empleo porque hay 35.000 puestos de trabajo en juego. Hay que tenerlo muy en cuenta porque si apoyan a las empresas, apoyarán el empleo. Necesitamos la ayuda del Gobierno y de la banca con carencia de intereses y amortizaciones, exención de impuestos –que sean proporcionales a los beneficios de los empresarios-, subvenciones directas y más agilidad en los trámites burocráticos. El Gobierno central tiene que tener en cuenta que las personas, o trabajan o cobran paro, por lo que consideramos que hay que dotar a las empresas para que sigan generando actividad y creando empleo.

Una vez que se acabe con la pandemia del coronavirus, ¿podrá recuperarse la normalidad de meses atrás?

Volveremos a la normalidad pero requerirá un proceso, con normas sanitarias, que serán las que nos marquen las directrices de aforo, de distancia entre mesas y los controles de acceso a los establecimientos, porque la salud prima por encima de todo. Y las cosas no volverán a ser iguales, está claro que habrá un proceso para adaptarse a la nueva situación.  Pero antes, todos tenemos un objetivo claro, hay que vencer esta pandemia. De momento, parón total y también incertidumbre, porque no sabemos cuándo vamos a poder abrir, pero estoy seguro que, de ésta, salimos, aunque hay que hacer las cosas bien para que no se vuelva a repetir.

¿Teme que esta crisis sanitaria acabe con negocios y empresas?

Hay temor, hay desánimo y preocupación, porque el momento actual es de ingresos cero y, en muchos casos, son pequeños autónomos. Hay que intentar apoyar a estos emprendedores para que puedan seguir con la actividad cuando finalice el estado de alarma, que se pueda mantener el empleo y proteger a los trabajadores. Hay que reinventarse, habrá un tiempo que lo presencial perderá protagonismo frente a lo digital, apostar por la calidad. Entre todos, lo superaremos. Creo que los españoles están reaccionando de una manera única, heroica, excepcional, valiente, colaborando todo el mundo, marcando la  diferencia que no ha marcado el Gobierno central. La hostelería en España representa más del 12% del PIB, más de 317.000 establecimientos y 1,7 millones de trabajadores, si no se blinda, habrá un agujero económico importante. 

Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios

Lo más leído