La mascarilla se ha convertido en un complemento obligatoriopara todos los españoles. Como si de la ropa interior o de una camiseta setratara, ya no podemos salir de casa sin llevarla puesta, y pocos son los momentosen los que podemos retirárnosla de la cara cuando estamos lejos de nuestro hogar,ya que su obligatoriedad se ha instaurado tanto en la vía pública como en espacioscerrados.
Uno de esos momentos es cuando viajamos solos en nuestrovehículo o con personas convivientes. Pese a que muchos la continúan llevando puestacuando conducen y se encuentran solos, lo cierto es que en esos instantes noestá implantada su obligatoriedad.
Llega entonces otro problema que es de nueva creación: quéhacer con la mascarilla. Pese a que lo recomendable es guardarla en una bolsa oestuche específico, poca gente lo hace. El lugar más habitual donde se sueleguardar una vez que se quita es en el bolsillo, aunque también puede pasar porotros puntos: bolsos, mochilas o, en el caso del coche, guantera o espejoretrovisor.
Sin embargo, lo que poca gente sabe es que llevar la mascarillaen este lugar está prohibido. No sólo eso, sino que con lleva una multa de 80euros. Eso se debe, tal y como refleja la página Neomotor,a que se incumple una norma establecida en el artículo 19 del ReglamentoGeneral de Circulación en el que se especifica que el conductor está obligado amantener el campo de visión necesario y la atención permanente a la conducciónpara garantizar su propia seguridad y la de sus pasajeros.
Así, al colgar la mascarilla del espejo retrovisor, seconsidera que la misma nos impide la visión en el centro del parabrisas y,además, puede ser considerada como objeto de distracción en la conducción y,por tanto, motivo de accidente.