La cena es uno de los momentos claves del día para las personas que quieren perder peso o controlar su línea. Hacerla demasiado tarde o ingerir productos con demasiadas calorías puede ser fatal para conseguir esos objetivos saludables, ya que después de cenar las personas suelen irse a dormir, por lo que el gasto calórico posterior a la ingesta es muy reducido.
Por ello, es importante encontrar alimentos que aporten nutrientes y sean buenos para la salud en ese momento de la jornada y que no sean una “bomba calórica”.
Las frutas son una de las mejores opciones y, entre ellas, destacan las fresas. Se trata de un aliemnto con muy pocas calorías pero con muchos beneficios para el organismo, que permitirá llenarse el estómago sin llenar el cuerpo de sustancias innecesarias.
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