La moda los pisos turísticos cada vez más en auge: Salamanca se acerca ya al medio millar de alojamientos

El modelo de alquiler vacacional que surgió como respuesta a la búsqueda de un lugar cómodo en el que alojarse, ha crecido en los últimos años de manera notable tanto en la capital salmantina como en la provincia

Turistas por las calles de Salamanca
Turistas por las calles de Salamanca

Un modelo vacacional que apenas existía en la ciudad hasta hace relativamente poco y que en los últimos años se ha multiplicado de manera notable. Los alojamientos turísticos han ido creciendo año tras año hasta alcanzar los 378 en la capital (con más de 2700 plazas de promedio asociadas), una cifra que se eleva hasta los 494 en toda la provincia (con un promedio de 4628 plazas) y que sigue sumando adeptos entre aquellos que optan por pasar unos días en Salamanca.

Alojamientos perfectamente preparados, muy cuidados en la estética y, sobre todo, sustancialmente más baratos que las habitaciones de hoteles al uso y que surgieron como respuesta a las necesidades de los turistas que buscaban un lugar cómodo en el que alojarse durante sus vacaciones.

“Pequeños propietarios que tenían una vivienda o un apartamento han optado por rentabilizarlo de esta manera y han sabido ver las ventajas que este otro modelo de alquiler les ofrece, no solo en el aspecto económico. Muchos son salmantinos que ahora viven fuera y, sencillamente, quieren disponer de su casa cuando vienen por unos días”, señala José Félix Tío, responsable de Urbia, una empresa salmantina dedicada a la gestión de este tipo de alojamientos.

Sin embargo, este modelo de alquiler no solo es utilizado por visitantes, sino que también hay quien los elige “por otros motivos y necesita disponer de un apartamento por un determinado periodo de tiempo, quizá un par de semanas, uno o dos meses… y el modelo de alquiler de vivienda habitual no encaja en sus necesidades”, señala Tío.

“Hoteles y apartamentos turísticos se complementan y el viajero elige”

El auge de los apartamentos turísticos podría parecer que ha variado su uso en detrimentos de los alojamientos tradicionales como los hoteles, aunque no sería así. “Si se analizase esta cuestión desde un punto de vista imparcial, seguramente hoteles y apartamentos se complementan dentro de una oferta donde el viajero, sencillamente, elije. Hay muchos perfiles de viajeros y ellos merecen tener a su alcance todas las opciones posibles”, señala el responsable de esta empresa salmantina.

Precisamente en cuanto a estos perfiles se refiere, en Salamanca es elegida “por familias, parejas o pequeños grupos que vienen a pasar unos pocos días atraídos por nuestra maravillosa ciudad. Proceden, más o menos a partes iguales, de cualquier parte de España y del extranjero. Y no solamente de Europa o países occidentales. Por suerte, los salmantinos podemos estar muy orgullosos de la gran riqueza cultural que tenemos en la ciudad que atrae cada vez más”, añade Tío.

“Los problemas con los vecinos es otro de los falsos mitos que existen”

Relajarse, disfrutar de la amplísima oferta cultural que ofrece la ciudad, la gastronomía o descansar, son algunos de los motivos por los que los visitantes eligen la ciudad. Personas “extremadamente respetuosas” que desmontan el “falso mito que existe todavía” de los problemas con las comunidades de vecinos y las molestias que puedan causar.

Este incremento en el nuevo modelo de alquiler turístico también podría relacionarse con la reducción de la oferta de pisos para estudiantes, un hecho que también desmienten desde Urbia. “Quizá siempre buscamos un culpable cuando grupos de jóvenes no encuentran una vivienda acorde a sus necesidades o ven que el precio, en general, se ha incrementado. Creo que éste es un problema serio en el que el alquiler turístico influye más bien poco. Al menos en nuestra ciudad”, señala José Félix Tío.

“Creo que el problema real es que el porcentaje de jóvenes que pueden permitirse formalizar una hipoteca hoy en día ha caído estrepitosamente en pocos años, por lo que cada vez más gente se ve obligada a ‘vivir de alquiler’. Lejos de reducir la oferta, hoy hay más pisos en alquiler, pero, muchísima más gente que los solicita. Y en este sentido, los estudiantes quizá sean los más perjudicados”, añade.

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