El color dorado de la piedra franca de Villamayor de la Catedral de Salamanca convive desde hace un tiempo con el verde de la naturaleza que se está abriendo paso en varias partes del monumento, como en la cúpula e inmediaciones de la Torre del Gallo. "La acumulación de tierra y arena, por ausencia de limpieza y mantenimiento, así como unas buenas condiciones de humedad, permite la proliferación de vegetación", ha denunciado la asociación Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio en sus redes sociales.
Cualquier visitante que recorra Ieroniumus podrá comprobar lo anterior. Por ello, la asociación se sorprende de que el Ayuntamiento de Salamanca quiera ampliar el famoso recorrido por las torres de la Catedral, "captar más visitas e ingresos" sin acometer antes tareas de conservación y limpieza que se extiendan a las limas y a las tejas de la cubierta de la parte nueva del templo.
Desde la Plaza de Anaya, por encima de la Portada de Ramos, se aprecia un vergel. pic.twitter.com/zff6tO0kPF
— Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio SALAMANCA (@ACDPatrimonio) April 18, 2024
La vegetación que crece en la Catedral es incluso visible sin subir a lo alto de la misma. "Desde la Plaza de Anaya, por encima de la Portada de Ramos, se aprecia un vergel. Y desde el Patio Chico podemos contemplar el desastre y la ruina a la que el Cabildo lleva a la joya del románico salmantino", señala la asociación Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio en Salamanca.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios