A todos los periodistas, compañeros y amigos de Roberto Fraile, “no nos gustaría que se tuviera que entregar esta medalla”. Son palabras del presidente de la Asociación de Salmantina de Periodista, Diego Matos, en el discurso que ha inaugurado la entrega de la Medalla al Mérito Profesional a título póstumo para el reportero afincado en Salamanca.
No les hubiera gustado, no porque este reconocimiento -de agradecer por parte de la Junta desde los periodistas de Castilla y León- no se lo mereciera, sino por el simple hecho de que probablemente el resultado sería otro y Roberto todavía estaría cuadrando sus vacaciones, descansos y turnos en su trabajo como cámara de la televisión local de Salamanca, para hacer la maleta y volver a viajar a un lugar perdido del mundo para contar su pasión, “la verdad”, como lo ha catalogado el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, encargado de entregar este reconocimiento a los hijos de Roberto Fraile.
El ser humano tiene la peculiaridad de decir las cosas cuando uno ya no está y con los reconocimientos pasa lo mismo. Ciertos profesionales se merecen disfrutar en vida de lo que la gente tiene que decir de su trabajo, de cómo admiran su forma de luchar por el periodismo y por entregar su vida para contar la historia de los que no pueden tener voz.
A Roberto este reconocimiento le llega después, de la mano de la Junta de Castilla y León que se volcó desde el primer momento que se conoció su asesinato para poner en valor la imagen del cámara afincado en Salamanca. Este viernes en la Capilla del Colegio Fonseca de la capital salmantina los hijos de Fraile han recogido la Medalla al Mérito Profesional otorgada por la Junta a su padre, del que ellos “están orgullos”.
Precisamente, ha sido la madre de los hijos de Roberto Fraile, la también periodista Lidia Marcos, quien ha puesto voz a una emotiva carta escrita por Carla y Daniel dirigida a su padre: “Hola papi, nunca dejarás de estar con nosotros”.
Palabras en las que no han hablado del Roberto Fraile periodista, sino de la figura de un padre que ya no está, pero que les deja un legado eterno: “Nunca tuvimos miedo de que te pasara algo y nunca te dijimos nada porque te fueras. Si a ti te hacía feliz, a nosotros también nos hacía felices. Qué mejor profesor que tú. Sin ti será más difícil disfrutar de la vida, pero lucharemos día a día por ser felices”.
“Podéis estar muy orgullosos de vuestro padre. A veces lo habéis extrañado, pero estaba ayudándonos a todos”, ha expresado Mañueco en un día de “sentimientos encontrados” después de hacer entrega de este reconocimiento.
“Su pasión era la verdad y por ello queremos reconocer toda una vida dedicada a la información, a la libertad y a la verdad”, ha reconocido Mañueco en un discurso donde también ha anunciado que uno de los premios de la SEMINCI, Semana Internacional de Cine de Valladolid, llevará el nombre del fallecido reportero.
El acto ha contado con la presencia de numerosas personalidades de Salamanca y de la Comunidad, otros tantos compañeros de la prensa, amigos y familiares. Todos para reconocer la labor profesional de Roberto Fraile, un luchador por la libertad de prensa y la verdad del periodismo, pero siempre en el plano del antagonista: “silencioso, detrás de la cámara y entregado a su trabajo”
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