El obispo de Salamanca, Carlos López, ha respondido ante las informaciones publicadas en El País, y de las que SALAMANCA24HORAS se ha hecho eco, que daban a entender que había ofrecido una compensación económica a una víctima de abusos sexuales de un sacerdote.
En un comunicado, la Diócesis de Salamanca se refiere al titular de 'Un obispo animó a una víctima a poner precio a su silencio', desarrollado posteriormente en las páginas interiores. Titulares y declaraciones que, para el obispo, es "una evidente manipulación informativa", sin fundamento y que "contamina la veracidad del conjunto de la información restante".
Así, en sus palabras, "estas frases solo tienen una interpretación literal y lógica" ya que se habla de una "reclamación por comensación de daños" como parte del proceso. Por ello, sugiere a "todo lector u oyente de los medios de comunicación que se tome unos minutos de su tiempo para analizar críticamente y que cada uno se forme su propio criterio".
Este es el comunicado al completo:
1. El periódico EL PAÍS en su edición del lunes, día 29 de octubre, anunció en primera página una noticia titulada: “Un obispo animó a una víctima a poner precio a su silencio”. En la página 26 desarrolló ampliamente la información e incluyó entre comillas las siguientes frases atribuidas al Obispo de Salamanca: “Si presentas una petición de compensación de daños, el tribunal lo estudiará”… “Si quieres una compensación económica, preséntala por escrito. Todo tiene que constar por escrito.”
2. Estas frases sólo tienen una interpretación literal y lógica. Se está indicando que la reclamación por compensación de daños debe ser parte del proceso y ha de constar en las actas para que el Tribunal la tome en consideración.
3. El texto anunciado en la primera página es una evidente manipulación informativa, que no tiene fundamento en las manifestaciones atribuidas al Obispo de Salamanca, ycontamina la veracidad del conjunto de la información restante.
4. Sugerimos a todo lector u oyente de los medios de comunicación que se tome unos minutos de su tiempo para analizar críticamente el texto escrito y para escuchar el audio correspondiente. Y que cada uno se forme su propio criterio.