La huella dactilar ya es una de las herramientas más utilizadas por los móviles de nueva generación para poder desbloquearlos. Al ser un carácter único e irrepetible esta modalidad de acceso confiere una mayor seguridad (y comodidad) al usuario. El siguiente paso se antoja más que evidente: el pago a través de la huella dactilar.
La compañía francesa Thales, según recoge en su información “Infotechnology”, ha anunciado recientemente que ha logrado desarrollar una tarjeta de pago que incluye un sensor de huellas dactilares integrado. De esta manera, se permitiría una mayor seguridad, una simplificación del uso y el límite de los pagos sin contacto.
La funcionalidad es sencilla: se sustituye el clásico pin de seguridad por las huellas dactilares del propietario y no requiere modificaciones en terminales ya existentes. ¿Lo mejor? Que es una tarjeta que quedaría inutilizable fuera de las manos del dueño, evitando gastos adicionales de ningún tipo provocados por robos o pérdidas de la misma.