De detención a sanción leve. Así puede quedar el incidente originado por el joven que, el pasado mes de diciembre, acabó arrestado por la Policía Local después de compartirse en redes sociales los dos baños que se pegó de madrugada en el estanque de los patos de la Alamedilla y en la pequeña lámina de agua situada en la plaza de la Constitución, en Gran Vía.
Con motivo de los hechos, la Policía Local de Salamanca presentó un escrito al servicio de Parques y Jardines de la capital salmantina para que valorase los posibles daños ocasionados tanto en el estanque como en la fuente de Gran Vía, con el fin de realizar el correspondiente atestado.
Tras la inspección de rigor, el servicio ha constatado que el joven no ocasionó daño alguno en ninguna de las dos zonas en las que se bañó, por lo que el técnico municipal competente ha propuesto que el joven reciba una sanción tipificada como "leve" por el incumplimiento del artículo 12.2 de la Ordenanza Municipal sobre Protección de la Convivencia Ciudadana del Ayuntamiento de Salamanca, consistente en introducirse en fuentes y estanques de la ciudad.
A esta falta le corresponde una sanción de 750 euros, por lo que con casi total seguridad el incidente nocturno sólo perjudicará al joven en que deberá rascarse el bolsillo.