La pasarela que unirá Huerta Otea y Tejares podría estar funcionando en otoño

Esa es la idea del Consistorio, si bien para ello necesitan que la CHD permita reanudar los trabajos, algo que podría ocurrir a finales de abril

 Pasarela Lunes de Aguas proyecto 2
Pasarela Lunes de Aguas proyecto 2

Uno de los grandes proyectos -más que por inversión, por significado e importancia- de esta legislatura del Ayuntamiento es la construcción de una pasarela peatonal que unirá los barrios de Tejares y de Huerta Otea y que, además, permitirá el acceso a los huertos urbanos. Y la idea del Consistorio es que esté en funcionamiento este próximo otoño.

Así lo confirmaba el alcalde, Carlos García Carbayo, en la presentación de la noria de sangre, cuya restauración ha sido enmarcada en la estrategia Edusi Tormes+, al igual que la pasarela. El problema de esta última es que ahora mismo está en stand-by por decisión de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), que paralizó las obras por temas burocráticos.

Una vez que se ha enviado toda la documentación requerida a la CHD, García Carbayo mostró su esperanza porque, a finales de abril o principios de mayo como tarde, se puedan reanudar los trabajos, lo que podría permitir que en otoño la pasarela ya prestara servicio.

En la actualidad no existe ninguna comunicación entre ambas márgenes del Tormes al oeste del puente de la Universidad hasta llegar a la pasarela de la impulsión de aguas residuales de la antigua EDAR de Huerta Otea, que se sitúa a unos dos kilómetros aguas abajo. Debido al desarrollo urbanístico de este barrio, con un constante crecimiento de población y la creación de residencias urbanísticas, esta pasarela evitará la actual barrera que supone el río.

Adicionalmente, este proyecto está relacionado con la actuación dirigida a la creación de 600 Huertos Urbanos en la zona de Salas Bajas, facilitando su acceso, además de conectar los corredores verdes de ambas márgenes del río, un proyecto actualmente en redacción.

La nueva pasarela tendrá una longitud de 167 metros, distribuidos en cinco vanos con un ancho útil de 5 metros, y una pendiente longitudinal variable, situándose el punto alto en el centro de la pasarela. La sección transversal está formada por dos vigas cajón laterales de 66 centímetros de ancho y 79 de canto, de acero y forma trapezoidal.

Dispondrá de cuatro pilas en el cauce del río, en forma de V, con un travesaño superior situado a media altura que permite dar apoyo al tablero a través de aparatos de apoyo de neopreno zunchado. Dichas pilas, que se elevarán sobre la rasante 5,25 metros, servirán además como punto de anclaje de los tirantes.

Además de unir los barrios Tejares y Huerta Otea, este proyecto mejorará las condiciones de desplazamiento a pie al conectar nuevos senderos y fomentará la movilidad sostenible a través del transporte en bicicleta entre ambas márgenes del río. Así, en esta zona está proyectada la ejecución de un carril bici de 1.500 metros entre Salas Bajas y los barrios de Chamberí, Tejares y Buenos Aires, y otro de 1.300 metros en la margen derecha entre los sectores de Marín y La Platina. Además, durante el recorrido se habilitarán cuatro bases del sistema municipal de alquiler de bicicletas, SalEnBici.

El proyecto también desarrolla iniciativas de ahorro y eficiencia energética, pues se instalará iluminación led para reducir el consumo eléctrico. El resultado global será la puesta en valor de los recursos ambientales, paisajísticos y dotacionales asociados al espacio fluvial.

La nueva pasarela entre la prolongación del paseo Lunes de Aguas y la calle Juan Ruíz Peña configura al río Tormes como espacio de oportunidades, creando un gran corredor ecológico fluvial integrado en la estructura urbana de la ciudad. De esta manera, se equilibran las oportunidades de desarrollo y de calidad de vida entre los diferentes barrios de la ciudad.

Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios

Lo más leído