Peace City World: cuando una investigación periodística acaba en los juzgados

Keffiyeh, thobe, agal… son algunos de los elementos de la vestimenta de los hombres de Oriente Medio y Arabia. Son los tradicionales trajes largos, los pañuelos para la cabeza o el cordón que los sujeta; elementos muy característicos, pero poco comunes de ver en la ciudad de Salamanca.

Sin embargo, durante los primeros meses de 2023, salmantinos y visitantes se toparon con la presencia de decenas de personas con estas vestimentas. En toda España se centraron las miradas en Salamanca, el proyecto del Peace City World buscaba convertir una ciudad Patrimonio de la Humanidad en la nueva Dubai, con telesilla incluido hasta Carbajosa o tranvía hasta Matacán y el tema ganó una relevancia en el panorama informativo nacional como pocas veces se ha visto en los últimos años sobre un tema de la ciudad.

Noticias sobre el proyecto que se iba a realizar, entrevistas con personas que formaban parte de la organización, enviados especiales, tertulias… en definitiva, mucho bombo. Algunas noticias meramente informativas, otras con tintes irónicos y muy pocas cuestionando el proyecto.

Con ese panorama se sucedieron los días y al congreso del Peace City World, celebrado del 23 al 27 de enero, daba paso a una firma de un protocolo entre la organización, Diputación de Salamanca y ayuntamientos de Salamanca, incluido el de la capital -además de la participación paralela de la Cámara de Comercio y la Universidad de Salamanca-. Un acto que se materializó el mismo 27 de enero en el Salón de Recepciones y que dejó una imagen para el recuerdo: alcaldes y alcaldesas con bandas identificativas como si de un concurso de belleza se tratara.

Las dudas empezaban a aparecer en torno al proyecto, porque algunas empresas supuestamente vinculadas desmentían cualquier tipo de contacto con el Peace City, pero todo seguía adelante, más aún cuando uno de los principales precursores de la iniciativa, el concejal de Turismo Fernando Castaño, defendía que ya había empresas poderosas que se habían fijado en Salamanca a partir de este proyecto.

¿Cómo se destapó la falsedad desde el lado del periodismo? Un currículum inventado que ‘colaron’ al Ayuntamiento de Salamanca

Paralelamente, este medio de comunicación, que decidió desde el primer momento no hacer eco informativo de este proyecto al no existir una comunicación clara sobre el mismo o el origen de los participantes, llevó a cabo una investigación para tratar de esclarecer la veracidad del proyecto.

No fue tarea fácil, puesto que toda la información relativa al Peace City World provenía de la propia página web de la organización o de medios de comunicación haciéndose eco de las noticias recientes, a pesar de que este medio ya tenía conocimiento desde más de dos años y medio antes de la llegada a Salamanca de Johan Mavrak, presidente del grupo.

No había muchos hilos de los que tirar, pero después de meses de investigación en Salamanca24horas.com dimos con la faceta escritora de Fernando Castaño, concejal de Turismo en el Ayuntamiento de Salamanca en esas fechas -esta investigación le costaría el puesto más adelante-.

Lo curioso no fue traer a la actualidad las prácticas literarias de Castaño, sino el prólogo de ese libro, ‘El Martillo de los Tontos’, firmado por José María Fuentes, asesor del proyecto de los 'jeques'. Un prólogo en el que el propio ‘conseguidor’ del Peace City World aseguraba que el libro trataba sobre su vida y que había subido a la cima del mundo para después caer. Algo sospechoso para alguien que en su perfil de LinkedIn presumía de un CV envidiable y de ser un destacado perfil que hablaba en charlas y conferencias.

A pesar de que la figura de Fuentes ya había aparecido en algunos medios de comunicación, con entrevistas incluidas, realmente nadie sabía de dónde había salido, ¿quién era y por qué había conseguido traer, supuestamente, un congreso con hombres tan poderosos?

Una primera búsqueda en internet solo ofrecía su perfil de la red social LinkedIn. Máster en Harvard y en ICEX, diferentes estudios en la Universidad de Salamanca y una dilatada experiencia profesional relacionada con asesoramientos a grandes entidades.

De hecho, su carta de presentación era la de asesor conjunto del Comité Conjunto del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, pero también tenía otros puestos como miembro del grupo de Expertos sobre Derechos Especiales de Giro, subsecretario de Fondos Soberanos y una extensa lista.

Hablante de cinco idiomas, según su perfil, español, inglés, árabe, alemán e italiano y un sumario en el mismo CV algo sospechoso: “Por razones técnicas, mi perfil fue bloqueado en 2015. Después de todo este tiempo, he podido hacer algunos cambios y actualizaciones, pero aún persisten algunos errores: fechas, cambios de idioma, etc., y lo más importante, hay experiencias que no puedo añadir. Pido disculpas por los inconvenientes”.

Una persona con una dilatada experiencia y con cargos en importantes entidades debía tener referencias en internet, sin embargo, en el amplio abanico de la red la información sobre su experiencia o su perfil era nula.

Esa falta de información, el libro de Castaño y esa extraña reseña en su perfil de LinkedIn llevó a Salamanca24horas.com a enfocar la investigación en la figura de Fuentes.

 

Un puesto en el Ayuntamiento de Salamanca por delante de empresas

Durante la investigación sobre el caso del Peace City World, este medio se fue haciendo eco de algunas rarezas que iba ofreciendo el proyecto, al igual que algún medio local y sobre todo uno nacional -como Cuatro a través del programa ‘Todo es Mentira’-.

Algo que no sentó bien en otros medios de comunicación locales, que decidieron criticar a través de artículos y columnas de opinión este trabajo periodístico. Se hablaba de que solo querían -haciendo referencia a los medios críticos con el congreso- un desgaste para la imagen de la ciudad, pretendiendo convertir el evento en motivo de mofa o como ariete de desgaste político contra el Consistorio, insinuando, erróneamente, que esas publicaciones se basaban en intereses políticos por la cercanía de las elecciones municipales. Una postura que algunos mantuvieron incluso cuando Ayuntamiento y Diputación rompieron con el Peace City World a raíz del descubrimiento de este medio.

Volviendo a la investigación periodística, se pudo comprobar que José María Fuentes había logrado obtener la mejor puntuación en un concurso público presentado por el Ayuntamiento de Salamanca para atraer inversiones de capital extranjero a la ciudad de Salamanca, puesto que salió a licitación tras aprobarlo todos los grupos políticos del Ayuntamiento en comisión.

Lo raro del resultado de esa licitación, que se puede consultar al ser pública, es que consiguió esa posición presentándose como persona física y quedando por encima de las empresas que se presentaron para hacerse con ese contrato público.

Su relación íntima con Fernando Castaño hizo más tarde dudar sobre si ese concurso estaba arreglado para su amigo Fuentes, algo que destacó en pleno municipal el concejal no adscrito y ex compañero de Ciudadanos, Ricardo Ortiz. Aseguró que cuando estaba en Ciudadanos se enteró de la contratación del “amigo del concejal” y que el propio Castaño le dijo que “cómo iba a venir sino alguien tan cualificado a Salamanca”. En ese sentido, insistió en que le advirtió que “no me parecía bien hacer un concurso para que lo ganara un amigo y esto no se hacía con dinero público. Está claro que si cuentas con toda la información de la memoria porque tu amigo es el concejal… Estaba claro quien ganaba el concurso y así ha sido”.

Sin embargo, esta información la haría pública más adelante, cuando ya se había descubierto la verdadera identidad de José María Fuentes.

Volviendo al puesto de Fuentes vinculado al Ayuntamiento y que consiguió a través de esa licitación, este tenía el objetivo de conseguir inversores para la ciudad de Salamanca. Sin embargo, desde la fecha de la adjudicación, en noviembre de 2020, y a pesar de cobrar más de 57.000 euros al año, no se le vinculaba con ninguna inversión para la ciudad salvo el controvertido Peace City World.

Un título falseado vagamente

Muchas dudas, pero pocas certezas. Con la información de la licitación en la mano, las incongruencias sobre su CV o la falta de datos en internet no eran suficientes para saber si de verdad José María Fuentes era la persona que ‘vendía’.

Una llamada al Centro de Estudios Económicos y Comerciales puso algo de luz entre tantas incógnitas para seguir con esta investigación periodística. Desde este medio preguntamos a fuentes del ICEX-CECO sobre los estudios de Fuente y en todo momento negaron que esta persona hubiera cursado algún máster de carácter oficial.

El supuesto máster que Fuentes apuntaba en su perfil de LinkedIn no era tal, se trataba de un curso y no de un máster oficial, pero ¿por qué pondría un simple curso disfrazado de postgrado en su CV? ¿Simple decoración o había algo más?

Sobre ese algo más giró el siguiente paso: ¿Y si no tiene máster oficial porque no puede tenerlo? es decir, para poder cursar un postgrado oficial se debe haber completado una carrera universitaria y por ese motivo este medio de comunicación preguntó a fuentes internas de la Universidad de Salamanca sobre el expediente universitario de Fuentes.

Tras días de dudas y sin respuestas, finalmente llegó la primera información que haría desmontar el perfil de Fuentes: no había terminado la carrera que aseguraba haber cursado en su CV y su expediente, de hecho, era bastante mediocre… Sin embargo, como la Universidad de Salamanca digitalizó los expedientes, antes estaban todos en papel, todavía cabía la posibilidad que se tratara de un error a la hora de cambiarles el formato. Tocaba esperar.

Mientras tanto desde este medio, según se iba sucediendo el congreso del Peace City World, se hizo un primer contacto con fuentes internas del Ayuntamiento de Salamanca sobre si había alguna incongruencia en la figura de Fuentes o en este proceso de licitación: nada, todo estaba en orden.

De hecho, ante la insistencia y para asegurarse que estaban en lo cierto, facilitaron parte de la documentación que ‘Pepe’ había presentado para la licitación.

Un documento de la Universidad de Salamanca de dos páginas, firmado, con asignaturas, créditos y notas… a simple vista cien por cien verídico. No obstante, entre ambos documentos se podía distinguir una ligera modificación en el grosor de la tinta, podía ser simplemente un defecto de impresión, pero lo que no era un fallo era la suma de los créditos totales que había falsificado de forma chapucera el asesor: las sumas no coincidían por ningún lado.

Un comportamiento ‘desleal’ del Ayuntamiento de Salamanca

Antes de que las fuentes de la USAL confirmaran que en el formato papel se confirmaba lo que ya nos habían avanzado, las personas que supuestamente habían firmado -signaturas simuladas por Fuentes- el documento falso, reconocían a este medio de comunicación que esa no era su firma.

Este medio volvió a ponerse en contacto con fuentes internas del Ayuntamiento de Salamanca advirtiendo de la posibilidad de la falsedad en los documentos presentado por Fuentes. Sin embargo, desde el Consistorio, lejos de agradecer conocer una información que hasta ese momento desconocían por completo, advirtieron a este medio de comunicación que la documentación que había presentado el asesor era completamente cierta y que la publicación de una noticia haciendo eco de esto mismo podría traer problemas legales a Salamanca24horas.com

En la mañana del 8 de febrero de 2023, esa confirmación llegó de manera oficial a la redacción de Salamanca24horas.com. José María Fuentes no tenía la carrera universitaria de la que alardeaba y, a partir de esa falsedad, todo lo demás se convirtió en un mar de dudas. La noticia se publicaría a las 11:20 horas de la mañana.

Desde el Ayuntamiento de Salamanca, lejos de reconocer la labor periodística de Salamanca24horas.com, decidieron emitir en menos de media hora un comunicado de prensa realizado de manera escueta y rápida; obviando el trabajo que había llevado a cabo este medio y atribuyéndose esa información.

El comunicado explicó que habían tenido conocmiento -como si de repente llegara del cielo- de que el asesor del Peace City World había falseado documentos y que rompían cualquier relación contractual con la organización del evento; además, a las horas comunicaron que el propio alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, acudiría a juzgados para interponer la denuncia. Todos los medios locales, nacionales e internacionales se hicieron eco de la noticia, pero no del trabajo de Salamanca24horas.com, de hecho, hasta una periodista de TVE se atribuyó toda la investigación, contando a paso a paso lo mismo que ya habíamos publicado.

Días después, y con la presión de la cercanía de las elecciones, el concejal de Turismo, Fernando Castaño, acabó pagando los platos rotos y el alcalde le retiró sus concejalías.

Consecuencias de una publicación que evitó un posible mal mayor por un proyecto del que ya comenzaban a jactarse en toda España.  Una investigación periodística que este miércoles se convertirá en judicial y será la Audiencia Provincial quien determine las culpabilidad de José María Fuentes, asesor del Peace City World.