Aun así, insta a "seguir desarrollando tecnologías propias" que permitan al planeta conseguir "energía limpia y barata para todos".
El ministro ha hecho este comentario en respuesta a un tuit de la cuenta del Programa Copérnico de la Comisión Europea (CE) y la Agencia Espacial Europea (ESA), en el que se mostraba un mapa que refleja los niveles de contaminación por NO2 en la UE correspondientes al 15 de octubre de 2019.
En dicho mapa puede apreciarse cómo en España predomina el color azul, con algunos focos verdosos y con algo de rojo en áreas como la Comunidad de Madrid, la costa catalana o la zona del Mediterráneo próxima al Estrecho de Gibraltar.
Según indica el Programa Copérnico, el nivel azul corresponde a niveles de NO2 de 0 microgramos por metro cúbico (ug/m3), mientras que el color rojo significa que se alcanzan los 100 ug/m3.
Sin embargo, el resto del continente aparece con zonas en rojo de manera más abundante que en España, destacando especialmente la zona del Benelux (Bélgica, Holanda y Luxemburgo) y Reino Unido, donde los niveles son "particularmente altos".
Expediente abierto a España
No obstante, Bruselas abrió expediente a España por la mala calidad del aire, expediente que se encuentra en tramitación y se resolverá en año y medio como mucho (a contar desde julio de 2019).
La sanción que imponga la Comisión Europea podría oscilar entre los 800 millones y 2.000 millones de euros, dependiendo si la multa empieza a contar desde que se empezó a incumplir, en 2010, o si se tiene en cuenta desde que se empezaron los primeros avisos, que fueron posteriores.
Hasta que este plazo se agote, la CE seguirá monitorizando España y vigilará las medidas que ésta adopte. Si la calidad del aire consigue unos niveles adecuados, podría cerrarse el expediente sancionador.
En concreto, el expediente abierto a España afecta a las ciudades de Madrid y Barcelona, incluyendo el extrarradio de esta última, pero Bruselas también ha expedientado a Avilés (Asturias) y a la localidad de Villanueva del Arzobispo (Jaén).