Se le conoce por el nombre de ‘Kink’, es una nueva práctica sexual y las autoridades están muy preocupadas por sus consecuencias: violencias, robos, enfermedades de transmisión sexual… Consiste, básicamente, en dejar la puerta del domicilio e invitar a cualquier extraño a entrar con el fin de mantener relaciones sexuales.
Por el momento, según informa ‘Los Replicantes’, la moda sexual se está extendiendo entre las aplicaciones de citas de Reino Unido, pero no se descarta que esta tendencia pueda emularse en cualquier otro país como puede ser España.
En una entrevista en Vice un asiduo a esta forma de practicar sexo detalla su experiencia: “La puerta está desbloqueada. Encuéntrame inclinado, con los ojos vendados y lubricado. Puedo ser tu anfitrión”.
‘Kink’ es una suerte de juego sexual en el que el morbo es el principal acicate para traspasar la línea de dejar acceder a un absoluto desconocido y mantener relaciones con dicho individuo. En muchos casos, según cuentan usuarios de esta práctica, ni si quiera llegan a ver el rostro de la persona que entra en su casa y fornica con el dueño o inquilino de la misma.
Agresiones sexuales, ETS y robos
Las autoridades de Reino Unido ya han advertido de los peligros de esta práctica, ya que la posibilidad de sufrir una agresión sexual, ser víctima de un robo o infectarse por una enfermedad de transmisión sexual (ETS) nunca es descartable.
Se recomienda tener siempre un teléfono cerca, comunicarle a alguien lo que se va a hacer y, por supuesto, denunciar cualquier tipo de agresiones que puedan producirse durante el juego sexual.
Igualmente, psicólogos y sexólogos precisan que el ‘Kink’ no tiene por qué ser necesariamente más peligroso que otras prácticas sexuales similares, pero siempre es bueno poner unos límites con la otra persona antes de iniciar el juego.