Por otra parte, Gabriel Risco, en aras de la creación de posible empleo estable y digno para España y para Europa, ha pronosticado la creación de veinte millones de puestos de trabajo en la Unión Europea de aquí a 2020; en España, más de dos millones para el mismo horizonte temporal. Pronostico que, eso sí, ha de basarse en los sectores de la economía verde, social y del bien común. “Estos puestos de trabajo se crearían en los sectores de las energías renovables, la rehabilitación de edificios con la finalidad de ahorro energético, agroecología y ganadería sostenibles, residuos y reciclaje, cuidados y dependencia de personas, ciencia y tecnología, el turismo y el ocio sostenible”, ha explicado. A la vez que ha asegurado que para la creación de estos empleos bien podrían utilizarse 200.000 millones de euros provenientes del ahorro energético, o estableciendo medidas que ayuden a aumentar los ingresos públicos mediante una nueva fiscalidad europea “en lucha contra el fraude y los paraísos fiscales”.
Así pues, y enlazando con lo anterior, Risco ha asegurado en representación de Primavera Europea que favorecerán el impulso del impuesto sobre las transacciones financieras internacionales, más conocido como la Tasa Tobin, “para poder moderar y controlar los movimientos financieros que han estado en la raíz de la presente crisis y cuya recaudación iría destinada a financiar las medidas de creación de empleo”. En suma, ve fundamental la realización de una auditoría ciudadana sobre el pago de la deuda, la cual cree ilegítima por corresponder a la banca en gran parte, “y hay que garantizar unos servicios públicos de calidad para todos los ciudadanos”. Esto último en colación con la defensa del voto que propuso a los partidos minoritarios y más en concreto a Primavera Europea frente a las acusaciones de los partidos grandes que indican que los votos a los partidos pequeños “no valen para nada”.
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