La semana pasada comenzamos a notar la bajada de las temperaturas. Los abrigos comenzaron a lucirse con mayor intensidad tanto en los escaparates de las tiendas de moda como en los cuerpos de los paseantes que dejaban verse por los aledaños de la Plaza Mayor y las calles más céntricas.
Aunque cada vez nos cuesta más dar carpetazo al verano porque cada vez se extiende por más tiempo, es hora de dar la bienvenida y, además, de hacerlo con los brazos abiertos, al invierno salmantino.
Este fin de semana, la AEMET alertaba del primer desplome del termómetro. La capital salmantina ha descendido durante esta noche a los -1 grados dejando estampas heladoras, como pueden apreciar en la siguiente imagen.
Los coches que duermen en la calle comienzan a teñirse de blanco.
Durante los próximos días parece ser que el termómetro no va a remontar y las mínimas de -1, 0, 1 y 2 grados por las noches vuelven a cobrar protagonismo un año más.