Uno de los problemas de salud con los que mucha gente tiene que lidiar con el paso de los años es la subida del colesterol. El colesterol es una sustancia grasa que está presente en todas las partes del cuerpo y es trascendental porque protege nuestros nervios, contribuyendo así a la formación de los tejidos celulares y a la generación de ciertos tipos de hormonas.
Sin embargo, pese a todos los aspectos positivos que genera en nuestro organismo, los niveles altos de esta sustancia grasa pueden producir algunos efectos adversos. Estamos hablando del LDL o colesterol malo, que es algo que impide que se formen depósitos grasos en los vasos sanguíneos impidiendo que la sangre fluya de forma correcta a través de nuestras arterias. De hecho, esos depósitos pueden llegar a romperse y, de esta forma, pueden llegar a formarse algunos cóagulos que pueden derivar en un infarto o en un accidente cerebrovascular.
Para prevenir estos efectos adversos, la Biblioteca Nacional de Salud de Estados Unidos ha dado a conocer las medidas que las personas pueden adoptar para bajar sus niveles de colesterol. Entre ellas, hay que destacar que es bueno llevar una dieta saludable para que el corazón limite la cantidad de grasas saturadas, presentes en alimentos como las carnes de vacuno y de cerdo, además de en la leche y en sus derivados. Los expertos recomiendan ingerir las calorías suficientes para mantener un peso saludable y evitar el sobrepeso y, además, comer variado con frutas, verduras, granos integrales y carnes magras. Entre los ejemplos de alimentos útiles para bajar el colesterol, se cuentan los aguacates, los frutos secos, el cacao en polvo o el chocolate amargo, el ajo y los pescados ricos en omega 3 como el salmón, el atún y la trucha. También pueden ingerirse frutas como el marañón o la morinda citrifolia, conocida como "noni", que es la mora de La India. Su capa exterior es de color verde pálido y su interior puede recordar a la chirimoya, de carne blanca y llena de huesos.
Respecto al control del peso, cabe destacar que las personas que sufren de sobrepeso deben bajar de peso para reducir el colesterol malo. Esto es aconsejable, sobre todo, en personas que tengan problemas o síndromes metabólicos. Además, se recomienda hacer ejercicio en forma regular, controlar el estrés, no beber mucho alcohol y dejar el tabaco (en el caso de que se fume).
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