Los radares que detectan si un conductor conduce sin carné de conducir, bien porque se le ha retirado por sentencia judicial o bien por la pérdida total de puntos por acumulación de infracciones, ya se encuentran operativos en España.
Este nuevo radar está fabricado con una ultimísima tecnología, dotado de un potente software con visión artificial capaz de leer matrículas y avisar a los agentes de todo tipo de infracciones relacionadas con la documentación del vehículo. En concreto, como estos radares están conectados a la base de datos de la Dirección General de Tráfico, el dispositivo mandará una alerta a los agentes en caso de que el vehículo captado por las cámaras pertenezca a un usuario que tenga retirado el carné de conducir.
Al estar conectado a la DGT, este inteligente dispositivo también detectará aquellos vehículos que estén circulando sin tener la ITV al día o sin seguro. Todas estas infracciones serán consideradas como “muy graves”, por lo que la multa saldría sabrosa.
De acuerdo con la legislación española, circular con el permiso de conducir retirado está tipificado como delito. El Código Penal, en su artículo 384, especifica que conducir sin carné puede conllevar penas de cárcel de 3 a 6 meses de cárcel, una multa de 12 a 24 meses o trabajos en beneficio de la comunidad que pueden oscilar entre los 31 y los 90 días.
Esta aplicación pionera de la tecnología está siendo desarrollada por el Grupo de Delincuencia del Automovil (GDA) de Navarra, donde también se desarrolló la prueba piloto del nuevo aparato. Por el momento, esta es la única región que ha comunicado la adquisición y utilización de este nuevo radar, si bien es cierto que no se descarta que en un futuro esta nueva modalidad de control de la seguridad vial se extienda al resto del territorio español.