Sale a la luz una técnica novedosa que limpia las arterias de colesterol

Científicos argentinos y españoles la han descubierto después de realizar un estudio, publicado en la revista Science

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El colesterol podría desaparecer de nuestras arterias. Así mismo lo determina un estudio llevado a cabo por científicos argentinos y españoles, publicado en la revista Science y que ha tenido eco en periódicos de tirada nacional como el AS, que han demostrado que existe una técnica novedosa para limpiar nuestras arterias y evitar la presencia de este lípido en nuestra sangre.

Al parecer, la galectilina-1, caracterizada por su efecto anti-inflamatorio, tendría mucho que ver. Se trata de una proteína que se ha convertido en un aliado clave contra el desarrollo de enfermedades vasculares. Esta hipótesis, respaldada por los científicos españoles del Instituto de Investigación Sanitaria de la Fundación Jiménez Díaz, junto con los investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina, demuestra su presencia en aortas sanas, además de su función para prevenir el desarrollo de placas en las arterias y al mismo tiempo, ser eficaz ante el desarrollo de aterosclerosis y del aneurisma aórtico abdominal (AAA). La investigación, que se realizó con ratones, evidenció que aquellos ratones que no tenían esta proteína desarrollaban un mayor número de placas, en comparación con otros que sí disponían de esta proteína.

Una de las principales autoras de este estudio e investigadora de la Fundación Jiménez Díaz - Universidad Autónoma de Madrid (UAM), Raquel Roldán-Montero, ha señalado la importancia de la presencia de esta proteína. "Los datos sugieren que la pérdida de galectina-1 se asocia al desarrollo de la enfermedad vascular", ha asegurado. Los científicos comprobaron través de estudios in vitro cómo los macrófagos deficientes en galectina-1 captaban más colesterol, mientras que el tratamiento con esta proteína prevenía la captación de colesterol.

De esta forma, el hallazgo de esta proteína supone un paso más para la ciencia y la medicina en la lucha contra el desarrollo de las enfermedades cardiovasculares más graves, como pueden ser el infarto de miocardio o el ictus. Actualmente, los principales indicadores para controlar los factores de riesgo son el nivel elevado de colesterol o de glucosa en sangre, la hipertensión arterial y el tabaquismo, entre otros.

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