En los últimos años se ha puesto de moda la aplicación Blablacar para viajar. A través de ella, los conductores que disponen de sitios libres en su vehículo, se ofrecen para llevar a pasajeros que estén interesados en llegar al mismo destino o a destinos intermedios. Así, los viajeros pueden contactar con el conductor, que previamente habrá puesto un anuncio de su viaje, para coincidir en los intereses del viaje. Una vez ambos están de acuerdo, el pasajero reserva el viaje a través de la propia aplicación, aportando la cantidad de dinero estimada y el conductor aceptará la reserva.
A pesar de la sencillez en el proceso, viajar con personas desconocidas puede traer quebraderos de cabeza. Así, la aplicación recoge varios consejos para evitar situaciones complejas.
Una de las situaciones que se puede dar es que uno de los pasajeros trasporte cualquier tipo de sustancia ilegal en su equipaje. En ese caso, ¿quién es el responsable si no se puede demostrar que esa maleta pertenecía al verdadero culpable?
En la aplicación, detallan que "el conductor es responsable de todo lo que se encuentra en el interior del vehículo, lo que incluye el equipaje de los pasajeros. Por lo tanto, tiene derecho a abrirlo y comprobar su contenido". Para evitar situaciones complejas, se recomienda a los usuarios etiquetar su equipaje.
No obstante, como ya se ha dado el caso en Salamanca, una pasajera fue claramente la portadora de sustancias estupefacientes y fue juzgada por ello, sin salpicar al conductor.
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