Incluso desde días antes de que comenzase elestado de alarma, el servicio de autobús urbano de Salamanca ha reflejadovarios problemas de seguridad, tanto a los pasajeros (falta de desinfección)como a los conductores (un plástico gigante que les protegía) e incluso a ambos(falta de visibilidad por dicho plástico).
Aspectos que siempre han sido denunciados porsindicatos y que se unen al último problema que han detectado. Organizaciones sindicalescon representación en Salamanca de Transportes se han puesto en contacto conSALAMANCA24HORAS para denunciar que el servicio de autobús se está viendo afectadocada vez que un conductor se ausenta.
Esto se debe a que, cuando falta untrabajador ya sea por baja laboral o por motivos personales, no es sustituidopor otro sino que el autobús se retira a las cocheras y la línea queda con unvehículo menos.
“Esto se traduce en más aglomeración de gentedado que, al estar el aforo limitado a 20 personas, puede que se tengan quequedar viajeros en la parada sin poder acceder al bus como de hecho ya hapasado en más de una ocasión”, indican fuentes sindicales, que no entiendenesta forma de actuar de la empresa “puesto que se ha acogido a un ERTE en elque debiera haber una proporcionalidad entre la reducción del servicio y lostrabajadores con el contrato suspendido”.
Por último se preguntan si el Ayuntamientotiene constancia y está al tanto de las “irregularidades” y “si estará pagandopor un servicio que no se presta a los ciudadanos”.