Después de más de una semana, desde el jueves 12 de marzo, de exigir el cierre de los centros educativos, la Consejería ha publicado con una nota en el Portal de Educación y a través de los medios de comunicación que los centros docentes no universitarios permanecerán cerrados. El cierre será efectivo desde este momento y mientras permanezca el estado de alarma.
El sindicato STE celebra esta noticia porque “es lo más razonable” dada la evolución del coronavirus -ya lo era el 12 de marzo, indican- y “descarga de tensión, preocupación e indignación” a los equipos directivos, profesorado y resto de trabajadoras y trabajadores de los centros educativos (ordenanzas, personal administrativo, personal de limpieza, mantenimiento ...) que durante la semana pasada han tenido que acudir a los centros.
Si bien es cierto que la mayoría de profesorado se ha quedado en sus domicilios para trabajar telemáticamente, miembros de los equipos directivos y del personal de administración y servicios estaban acudiendo a los centros educativos para mantener unos servicios mínimos “que no eran necesarios”, resaltan desde el sindicato.
STE ha sido muy crítico durante todo el tiempo que la Consejería ha mantenido la apertura de los centros y ha llevado a cabo “todas las acciones en sus manos” para intentar que la administración “rectificara y cerrara” los centros educativos, como han hecho la mayoría de las comunidades autónomas, especialmente después del Real Decreto de estado de alarma, publicado el 14 de marzo.
“Comunicados de prensa, peticiones a la Consejería de Educación, el Ministerio de Educación; presentación de una queja al Procurador del Común o presentación de un comunicado conjunto de los cinco sindicatos de la Mesa Sectorial” son algunas de las acciones que ha llevado a cabo durante esta semana, detallan. Además, el sindicato ha puesto a disposición del profesorado y de los equipos directivos su orientación legal para justificar la no asistencia a los centros educativos, en base a la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
El sindicato, que da la bienvenida a esta noticia tan esperada, lamenta la situación que se ha generado durante esta semana, especialmente para los equipos directivos, sobre los que ha caído “la inmensa responsabilidad de decidir quién iba o no iba presencialmente al centro”. Igualmente, otras trabajadoras y trabajadores se han visto obligados a acudir a los centros, como ordenanzas, personal administrativo o trabajadoras de la limpieza.
STECyL-i y STE-Salamanca aprovechan la ocasión para reiterar a la Consejera de Educación, Rocío Lucas, la petición de convocatoria de la Mesa Sectorial de Educación, ya que “en esta situación tan difícil es más necesario que nunca el diálogo con quienes representan al profesorado”. Asimismo, piden que se respeten los canales oficiales de comunicación y los marcos de negociación colectiva establecidos.
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