Un nuevo actor se ha colado en el mercado de los libros de texto: los colegios privados o concertados. Actualmente, en algunos de estos colegios, los padres pueden obtener los libros de texto de sus hijos directamente en el colegio, sin haber ningún intermediario. La venta directa en los colegios es una amenaza muy importante para los libreros, ya que se ven vulnerados por varias razones que provoca que los padres elijan la opción de los colegios por ofrecerles altos beneficios.
El primer problema es que las editoriales ofrecen importantes ventajas a los colegios, ventajas económicas que en muchos casos mejoran los precios de las librerías y por lo tanto, los padres eligen esta opción.
Además, de esta manera las familias no tienen que ocuparse de encargar los libros, ni tan siquiera de saber cuáles son los libros de texto que necesitan sus hijos para el curso. Por ahora, esta práctica que los libreros aseguran que es una realidad, se está produciendo en colegios concertados y privados solamente, sin afectar a los colegios públicos.
Los responsables de las librerías ven esta como la principal amenaza a día de hoy para su negocio por ser una competencia ‘desleal’ que en un futuro podría extenderse y reducir tanto la venta de libros de texto en las librerías que las podría obligar a cerrar. Las librerías no están dispuestas a convivir con esta competidora y esperan que no se generalice por el bien de sus negocios.
Este problema se plantea como de difícil solución ya que, mientras las editoriales sigan ofreciendo ventajas y mejores precios a los colegios que a las librerías, las familias siempre escogerán la opción más barata.