El primer fin de semana universitario ha venido acompañado principalmente de dos cosas: fiesta e indignación. Son muchos, por no decir la mayoría, los locales de Salamanca que están haciendo todo lo posible por salir adelante y cumplir a rajatabla las medidas necesarias para mantener la seguridad de los clientes; sin embargo, hay otros que están manchando la imagen de sus compañeros de profesión al no seguir ningún tipo de protocolo sanitario.
Fuera de los bares, la responsabilidad se traslada a los grupos de personas que deciden reunirse en grupos, a pesar de las recomendaciones sanitarias y el número elevado de contagios, ingresos y muertes que viene contabilizando Salamanca en los últimos días.
Este fin de semana el protagonismo se ha centrado en ambas situaciones. La primera, la que atañe a los locales, se ha dado en un bar de la plaza de Monterrey el viernes donde en un vídeo, que se publica junto a este texto, se puede apreciar cómo no existe ningún tipo de medida de distanciamiento y los clientes no están haciendo uso de la mascarilla.
En la segunda situación, en la de las aglomeraciones en la calle, este sábado se han dado prácticamente por todas las zonas de ocio nocturno de la capital, aunque con mayor incidencia en la zona de Gran Vía, San Justo, plaza de la Reina y la cuesta del Grillo. El viernes, del mismo modo, la Policía Local tuvo que disolver una aglomeración de unas 100 personas en la calle Consuelo.
Estas situaciones han creado gran indignación en muchos salmantinos que no entienden cómo “esta gente se puede saltar todo sin pensar en los demás”.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios