Estamos a escasos días de una de las fechas más marcadas en el calendario de todos los salmantinos. ¡La cuenta atrás ya ha comenzado!, hablamos como no, del Lunes Aguas, típica y ansiada fiesta para todos los salmantinos, quienes se reunen a las orillas del río Tormes o bajo las encinas del campo charro para dar rienda suelta a esta festividad, con un protagonista muy especial encima de la mesa, cuya misión es poner la ginda de sabor a tan espectacular picnic.
Seguro que ya estás contando los días para reunirte con los amigos y la familia, y hacer disfrutar a tu paladar de tremendo manjar. ¿Cuál? El auténtico hornazo tradicional, no podía ser otro.
Aunque este año la pandemia impide celebrar este día por todo lo alto, hay algo que sí puedes hacer, y es degustar este producto tan de nuestra tierra. ¿Cómo? Muy fácil. Al ser una de las delicias de la gastronomía salmantina podrás encontrarlo durante todos estos días en múltitud de establecimientos de la ciudad. Pero también puedes meterte en la piel de chef, y ponerte tú mismo manos a la obra. Te damos algunas indicaciones de cómo hacerlo.
Si finalmente aceptas el reto de poner tu propio sello a esta maravillosa receta, es importante que tengas en cuenta todos los ingredientes que debes tener encima de la mesa.
La materia prima para su elaboración sería: harina, manteca, sal, levadura, huevos, aceite de oliva y agua. A estos se le puede añadir vino blanco y pimentón dulce de la Vera. Para el relleno se puede utilizar toda clase de embutidos (lomo, jamón, chorizo o salchichón). Los ingredientes pueden variar en función de los gustos.
Otro dato a tener en cuenta es que las cantidades variarán en función del número de comensales. Lo ideal para unas 8-10 personas aproximadamente serían:
- 500g de harina
- 100 ml de agua
- 80 ml de vino blanco
- 25 ml de aceite virgen extra
- 60 g de manteca de cerdo
- 25g de levadura de panadería
- 2 huevos
- 10g de sal fina
- 1 cucharada de pimentón de la Vera
En primer lugar, se recomienda ablandar la manteca de cerdo unos segundos en el microondas. Acto seguido habría que darle forma a la masa, una vez que se le ha espolvoreado la harina por encima. Para ello podéis usar un bol grande de cristal. Una vez que tenemos hecha una pelota, hacemos un hueco en el centro de la masa y añadimos ahí el resto de ingredientes: agua, vino blanco, aceite, manteca, levadura, huevos y pimentón. Mezclamos toda la masa con la mano, y añadimos la sal (mientras estemos manipulando la masa es importante tener enharinadas las manos, para que no se nos pegue la masa).
A continuación, introducimos la masa en un bol, y la dejamos reposar entorno a media hora. Una vez finalizado este tiempo, debemos poner a calentar el horno, unos 10 minutos a 220 grados. Dividimos la masa en dos partes, y dejamos un poco de sobrante para la decoración final que incluiremos en la capa de arriba.
Una vez lista la masa, la estiramos sobre una superficie lisa a golpe de rodillo, y añadimos el relleno con los ingredientes que más nos gusten. Colocamos la tapa de arriba y lo cerramos bien por los laterales con los dedos para que no se escape el relleno. Decoramos la parte de arriba del hornazo, por ejemplo, trazando cortes diagonales con el cuchillo o haciendo figuritas que podemos colocar en la capa de arriba. Pincelamos con el huevo batido toda la superficie, y pinchamos la masa con un tenedor para que respire.
Finalmente, lo introducimos al horno y esperamos 30 minutos. Cuando lo saquemos lo dejamos reposar hasta que se enfríe y ¡listo para darle placer a tu paladar!
En el siguiente video podéis ver su elaboración paso a paso:
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