Una mujer planeó en Málaga una venganza contra un hombre que supuestamente había abusado sexualmente de su sobrina. Lo citó con la excusa de contratarlo para un trabajo de albañilería, y una vez en su casa le pegó una paliza con la pata de una silla. Ambos fueron detenidos, pero ya han recuperado la libertad, aunque el juez ha dictado orden de alejamiento al acusado, según informa el diario digital 20minutos.
El Juzgado de Instrucción número 10 de Málaga ha dictado una orden de alejamiento para el hombre. Según han confirmado a Europa Press fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), dicho juzgado tiene abiertas dos causas distintas, una contra la mujer por un delito de lesiones y otra contra el hombre por el presunto delito de abusos sexuales con penetración.
Según el diario Sur, los hechos tuvieron lugar la tarde del 27 de enero en la zona oeste de Málaga capital. La Policía Nacional recibió una llamada de una mujer que estaba llorando y sólo facilitó la dirección de una vivienda.
La Comisaría Provincial envío a la patrulla más cercana de la Brigada de Seguridad Ciudadana. Cuando iban de camino al domicilio, cerca ya del mismo, los agentes fueron requeridos por un vecino, quien les informó de que había un hombre sentado en un banco de la zona y estaba sangrando.
El hombre afirmó que había sido objeto de un robo con violencia en plena calle. Los agentes pidieron refuerzos para que asistieran al hombre y luego se dirigieron al domicilio de dónde habían recibido la primera llamada.
Una vez ahí, la mujer les contó la historia. Se había enterado de que este hombre presuntamente en mayo de 2019 había realizado tocamientos a su sobrina. Comenzó a investigar por su cuenta y vio que era albañil, por lo que le llamó con la excusa de pedirle un presupuesto para la reforma de un baño.
El día de los hechos, el hombre se presentó en el domicilio con todos sus utensilios y se dirigió con la mujer a ver el baño. Ella aprovechó un momento de descuido para coger un palo y comenzar a golpearlo mientras le recriminaba los supuestos tocamientos.
El hombre huyó como pudo de la vivienda y fue en la calle cuando lo detectaron los agentes, a quienes no quiso contar la verdad en un primer momento. Los agentes se llevaron detenidos a ambos para seguir con la investigación de los hechos.
Poco después, la mujer fue puesta en libertad sin medidas cautelares, investigada por un delito de lesiones.
Por su parte, el hombre también fue liberado, y es investigado por un delito de abuso sexual, con una orden de alejamiento de la menor.
En este procedimiento se está pendiente de tomar declaración a la chica de 13 años y a otros testigos, así como de practicar otras diligencias, han indicado las mismas fuentes.
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