Una enfermera de una clínica de pediatría y adolescencia en Ulm (Alemania) ha sido detenida por intento de homicidio al poner en riesgo de muerte a cinco bebés prematuros tras suministrarles morfina, según informa el diario digital 20minutos. Los recién nacidos sufrieron graves problemas de salud, según recoge una nota de prensa conjunta de la Fiscalía y la Policía del Estado de Baden-Württemberg.
Los investigadores acusan a la sanitaria de intento de homicidio y graves daños de salud en cinco casos. Según la policía y los fiscales, el hospital inicialmente sospechó una infección como la causa. Sin embargo, las pruebas en muestras de orina de bebé descartaron esto, según recogen los medios locales.
En las muestras aparecieron restos de la morfina, aunque al menos dos de los niños afectados no deberían recibirla. Tras esto, la directiva de la clínica universitaria avisó el 17 de enero a la policía para investigar lo ocurrido.
Los bebés prematuros a los que suministró el analgésico sufrieron problemas respiratorios potencialmente mortales el 20 de diciembre, pero fueron salvados gracias a una inmediata intervención médica. Actualmente, los pequeños permanecen ingresados y bajo evaluación de los sanitarios.
La enfermera fue sospechosa después de que la policía encontrase una jeringa con leche materna en una taquilla en el vestuario del hospital, que según los primeros resultados de la investigación forense en la Oficina de la Policía Criminal del Estado en Baden-Württemberg contiene morfina.
"Lamentamos mucho lo ocurrido y nos disculpamos sinceramente con los padres y los niños", ha asegurado el director del hospital, Udo Kaisers, en un mensaje publicado en su página web.
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