El prior de los Carmelitas defiende el “respeto” de los peregrinos ante Santa Teresa tras las críticas del obispo de Salamanca
Miguel Ángel González asegura que los visitantes “vienen con actitud de fe, devoción y cariño” y cifra en unas 50.000 personas las visitas en una semana
El prior de los Carmelitas de Alba de Tormes, Miguel Ángel González, ha asegurado desconocer las críticas que este lunes ha realizado el obispo de Salamanca, José Luis Retana, a la veneración pública de Santa Teresa. En declaraciones a Salamanca 24 Horas, el prior ha asegurado que: “lo único que voy a decir sobre este tema es lo que estamos viviendo, los peregrinos vienen con una actitud de fe, devoción y cariño a la Santa inmenso”. González añade que cuando “llegan, se celebra la misa y se queda todo en silencio, en oración” y añade que rezan “con un respeto impresionante. Muchos de ellos agradecen enormemente la posibilidad de renovar su vida espiritual”.
El prior insiste en que “eso es lo que vemos cada día y es de lo que podemos hablar”. Además, calcula que hasta el momento habrán rezado ante Santa Teresa unos 50.000 peregrinos y recalca el respeto con el que se ha trabajado desde que el pasado mes de agosto se abrió el sepulcro y comenzó el estudio del cuerpo de la santa. “Desde que se inició el proceso, se han seguido todos los procedimientos adecuados para un caso así de significativo, todo se ha hecho de la manera adecuada y con el mayor respeto”, concluye.
Cabe recordar que el sepulcro se abrió el pasado mes de agosto por tercera vez desde la muerte de Santa Teresa con el objetivo de estudiar el estado del cuerpo de la Santa en un proceso que ha ayudado a conocer mejor a la figura de Santa Teresa y que incluso ha permitido reconstruir su verdadero rostro gracias a la aplicación de procesos modernos. También ha permitido estudiar el sepulcro, limpiar los relicarios que guardan sus restos, entre ellos la fastuosa arca de plata que la guarda y de la que apenas se conocía nada. Un proceso que concluirá el próximo 26 de mayo cuando Santa Teresa regrese al sepulcro en la basílica de madres carmelitas, sus custodias durante 500 años.
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