Con este paso, el pleno zanja el asunto, impugnado por Izquierda Unida en los tribunales, al entender subsanado el vicio que se advertía en la sentencia que declaraba nulo el primer acuerdo plenario en este sentido. En su día, el juez estimaba que la fijación de una retribución para el concejal de Obras igual al sueldo que percibía anteriormente “no supone fraude de ley si bien el pleno debe atender al grado de responsabilidad y fijar la retribución del concejal de Obras y Servicios en régimen de dedicación exclusiva, atendiendo a este criterio”.
Así las cosas y teniendo en cuenta ese criterio, el Ayuntamiento adopta ahora esta decisión al estimar que la labor del edil “conlleva aparejada responsabilidad y dedicación que justifican el régimen de dedicación y su retribución en la cuantía propuesta”. Tal es esa responsabilidad que la cantidad que ahora se destina a retribuir al edil es aún mayor que la prevista inicialmente.
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