Con este cambio, explica el sindicato Comisiones Obreras a través de un comunicado, los platos se elaborarán en Venta de Baños, se distribuirán desde Valladolid, y llegarán a Béjar dos veces por semana. Para la empresa es más barato, explican, “pero se trata de la alimentación de los escolares en una edad clave para su desarrollo, por lo que no se puede recortar también en esto”.
Por su carácter comarcal al centro asisten alumnos de los pueblos del entorno que forzosamente se deben quedar a comer para poder hacer uso del transporte escolar, por lo que el comedor cuenta con más de 100 comensales a diario, a pesar de ser un centro pequeño. Además, es el único centro en Béjar que tiene comedor escolar con cocina de elaboración propia, un hecho que, además, “ha condicionado a parte de familias para elegir centro”. A lo que entienden que supondrá un empeorameinto de la calidad de la comida se une se une que en la cocina trabajan dos personas hoy por hoy. Al parecer, está previsto que la línea fría se implante en todos los centros en un plazo máximo de ocho años.
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