Otro Bien de Interés Cultural de la provincia, el castillo deCarpio-Bernardo, ha entrado en la lista rojadel patrimonio de laAsociación Hispania Nostra por el estado de ruina en el que se encuentra.
Los muros de la fortaleza, del siglo IX, ofrecen unpésimo estado con grietas, erosión y desprendimientos de sillarejos que laasociación atribuye a su uso como pista de motocross y quad, aprovechando elmontículo de los restos como plataforma de saltos.
El castillo es de planta rectangular y está flanqueadapor torres en sus ángulos, que cuenta con muros de gruesa mamposteríaconcertada con cal. La fortaleza dispone de un foso alrededor,un aljibe que se encuentra recubierto con pintura a la almagra y abundantesgrafitos medievales en su interior.
Los romanceros y las tradiciones orales remontan la fundación delcastillo de Carpio-Bernardo al periodo de la reconquista y atribuyen laconstrucción o su uso como morada al héroe leonés Bernardo del Carpio.
Sin embargo, las primeras informaciones documentales sobre el castillose remontan al siglo XII-XIII; este fue probablemente construido sobre lasestructuras del anterior. Se conoce que esta fortaleza jugó un papelrelevante durante las guerras entre León y Castilla, debido a suestratégica posición en la línea fronteriza entre ambos reinos.
Tras el fin del conflicto y la unión de los reinos, el castillo deCarpio-Bernardo, que había estado tanto en manos de leoneses como decastellanos, dejó de ser objeto de disputa. A finales del siglo XV, Enrique IVdonó la villa -con la fortaleza- a García Álvarez de Toledo, último condey primer duque de Alba de Tormes. En 1505, los Reyes Católicos mandaron derruirel castillo con la idea de frenar el poder de los dominios nobiliarios,en una época en la que el poder de los monarcas iba disminuyendo, explicaHispania Nostra.