La suciedad, la dejadez, el mal estado del pavimento y la falta de señales viales, son algunas de las múltiples quejas de empresarios y trabajadores que desarrollan su actividad laboral en el polígono industrial de Villares de la Reina. Una situación, según estos, que lleva siendo habitual desde los últimos años pero “ha llegado un punto en el que hay que alzar la voz, porque la situación es insostenible”, admiten.
Esta situación se ha agravado en los últimos meses y por todas las zonas del polígono “se repite. Las calles se han convertido en un contenedor de escombros, muebles usados y demás basura que la gente ha decidido ir depositando de madrugada”, admite el dueño de una empresa de la zona sur del polígono.
Muebles abandonados en la calle Gutenberg
Aseguran, del mismo modo, la lamentable situación en la que se encuentran los pocos contenedores existentes y la falta de otros para poder reciclar, “Las sujeciones de los contenedores se rompieron al mes y no se volvieron a cambiar. Cuando hay viento, estos acaban en medio de la carretera o volcados, la mayoría están rotos y encima no hay ninguno para poder reciclar”, admite un trabajador de la calzada de Castellanos.
Estado de algunos de los contenedores de la calle Esposos Curie
Del mismo modo, la gran mayoría coinciden en que la seguridad vial “brilla por su ausencia. El pavimento está destrozado, las grietas ya no son grietas, son socavones; el mínimo arreglo que hacen al poco tiempo está otra vez igual y encima cuando lo están reparando la señalización es escasa” cuenta a SALAMANCA24HORAS un usuario del polígono en la calle Severo Ochoa.
Pavimento en la calle Gutenberg
Otra de las cosas que demandan es la escasa señalización vertical, apenas visible, y la nula horizontal: “Las marcas viales del suelo desaparecieron hace tiempo, aquí la gente ya no sabe cuándo tiene preferencia o no, y entre unos que vienen despistados y otros que van por el polígono a más de 80 kilómetros por hora, los accidentes son constantes por ejemplo en este cruce”, afirma un trabajador de la calle Caño de las Pimientas.
Cruce entre las calles Caño de las Pimientas y Calzada de Castellanos
Todos demandan una mayor preocupación por el polígono “porque no está acordé, ni con el dineral que pagamos, ni con el status que debería tener el polígono. Llevan mucho tiempo sin hacer nada, si pasas por aquí un fin de semana que no hay coches la situación es aún mayor de absoluta vergüenza. El polígono está que da pena y la diferencia, por ejemplo, con el del Montalvo, es abismal”, relata preocupado un empresario de la calle Esposos Curie.
Una farola dañada que lleva tiempo sin repararse
Una de las mayores preocupaciones de los usuarios del polígono es la gran cantidad de suciedad que se acumula en sus calles. “La limpieza es escasa al igual que el mantenimiento de las calles, únicamente recogen los contenedores y si algo no se pueden llevar lo dejan tirado allí mismo, sobre todo, basura que encima trae gente de otros sitios. Hay varias empresas que se dedican a barrer sus entradas y a limpiarlo por su cuenta, porque dejan una mala imagen de sus negocios sin ellos tener culpa”, concluye otro trabajador del polígono.
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