Venía de la oposición y, aún así, se confiesa sorprendido por el estado de las cuentas del Ayuntamiento. Al joven alcalde Celso García le gustaría realizar una auditoria externa para conocer a fondo la repercusión económica de dos décadas de Gobierno del PP en la localidad. El estado de las arcas le hace conformarse, sin embargo, con el análisis interno y el punteo manual que se está llevando a cabo estos días pues hacerlo de otra forma ?nos sale muy caro?. No sale de su asombro por lo que va encontrando y asegura que Manuel Ángel Sánchez Cinos ha dejado ?una situación difícil en cuanto a liquidez?.
Mientras sigue buceando en la herencia recibida, García recuerda que no cobra sueldo de alcalde y apunta que, tal y como prometió en campaña, la transparencia es una de sus prioridades.
Mientras le toma el pulso a sus nuevas responsabilidades trata de dar solución a lo más urgente, la organización de las fiestas del municipio. Así, desde poco después de tomar posesión, trabaja ?con mucha intensidad? y apoyándose en los funcionarios mientras recibe multitud de visitas relacionadas con la próxima programación festiva.
El nuevo alcalde entiende que lo que queda de este 2015 es un periodo propicio para tener un buen aterrizaje al frente del Consistorio y espera que el estado definitivo de las cuentas le permita plantearse en 2016 proyectos de inversión que lleven el sello de Ciudadanos, el partido que gobernará la localidad hasta 2019.
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