La Mancomunidad de Vitigudino, integrada por una veintena de municipios del noroeste salmantino, aprobó en su última reunión su salida del Consorcio de Mancomunidades, integrado por Vitigudino, Abadengo, Arribes y Centro Duero, y cuya finalidad es la gestión de la recogida de basuras. El principal problema para tomar esta decisión es la deuda contraída con el Consorcio de Mancomunidades de 200.000 euros que mantiene la Mancomunidad de Arribes (Villarino, Pereña, La Vídola y La Peña), un asunto que ya viene desde lejos y que ya hizo poner ‘el grito en el cielo’ a los alcaldes de Pereña, La Vídola y La Peña, quienes han asegurado a este diario que están “al corriente de los pagos”. Circunstancia, por otra, parte, que no se explica entonces “dónde está el dinero ingresado por esos pueblos en lo concerniente a las basuras si se debe al Consorcio”. También, por si sirve de comprensión del problema, cabe decir que el presidente de la Mancomunidad Arribes es el alcalde de Villarino de los Aires, Ayuntamiento con serios problemas económicos y de financiación.
Uno de los temores manifestados por el presidente es la posible decisión de Girsa, órgano que gestiona el reciclado de basuras en la provincia, de que la deuda pendiente de la Mancomunidad de Arribes conlleve que Girsa “de esta manera no recicle más basura”. Sin embargo, el vicepresidente y diputado de Fomento, Carlos García Sierra, a preguntas de SALAMANCA24HORAS, asegura que “Girsa siempre realizará los servicios básicos para los que fue creada” como es el traslado de las basuras desde los centros de transferencia hasta el CTR y su tratamiento.
Pese a ello, García Sierra también deja claro que “Girsa tiene entre sus potestades sancionar” a aquellas mancomunidades que tengan deudas contraídas, pero nunca “dejará de prestar el servicio”. Además, el diputado de Fomento dice que “no entra en la gestión de las diversas mancomunidades, que tienen independencia en sus decisiones”.