Ledesma se ha empeñado en recuperar tradiciones casi olvidadas. Lo hicieron con las Calendas y ahora, con la llegada de la festividad de Todos los Santos, lo hacen con la fiesta de los Santos Mártires. Una celebración que fue recuperada el año pasado tras décadas sin celebrarse y que compite fuertemente con el Halloween moderno que se ha implantado en casi todos los sitios.
Con esta fiesta Ledesma recuerda su historia, la leyenda que cuenta que cien años después de su muerte, se encontraron los tres cuerpos de los mártires: un joven musulman convertido al cristianismo que murió por ello y sus dos maestros. Allí pasaron a considerarse mártires cuyo recuerdo se venera con la llegada de esta festividad. La tradición ledesmina mandaba asar patatas y degustarlos juntos con perronillas y vino.
Una tradición que se retomará por segundo año consecutivo este sábado. A partir de las siete de la tarde el Ayuntamiento abrirá sus puertas para mostrar en su patio la exposición de faroles antiguos. Los presentes podrán disfrutar del asado de patatas así como de la degustación de los dulces.
Además se pondrá el corto "Recuerdos olvidados".