A la reunión han asistido representantes de los ayuntamientos de Alaraz, Alconada, Aldeaseca de la Frontera, Bóveda del río Almar, Campo de Peñaranda, Cantaracillo, Coca de Alba, Mancera de Abajo, Macotera, Malpartida, Nava de Sotrobal, Paradinas de San Juan, Peñaranda de Bracamonte, Ragama, Salmoral, Santiago de La Puebla, Ventosa del río Almar, Villar de Gallimazo, Zorita de la Frontera.
En esta reunión se expuso a los representantes municipales las líneas básicas del modelo y el proceso abierto para su elaboración, en el que se incluye la participación activa de los ciudadanos. Los propios alcaldes fueron invitados por el delegado para que hicieran las aportaciones necesarias en todo momento; y contribuyeron con sus percepciones, sus dudas y sus propuestas. Todas sus sugerencias serán tenidas en cuenta.
El proceso que afronta la Junta de Castilla y León responde a factores como la crisis económica, la especificidad de la estructura territorial de Castilla y León, y la limitación de competencias y funcionalidad de las actuales mancomunidades. Se pretende fomentar el equilibro y la cohesión territorial y suprimir las duplicidades. No se suprimirán municipios, ni tampoco Diputaciones provinciales, aunque se evitará la creación de nuevas estructuras administrativas.
En el nuevo modelo de Ordenación del Territorio existirán dos tipos de Distritos de interés comunitario: los Distritos Rurales y los Distritos Urbanos. Los Rurales se delimitarán, de forma general, a partir de las zonas básicas de salud rurales. Los Urbanos serán los que se delimitan por el término municipal de cada municipio mayor de 20.000 habitantes. El modelo se completa con las Áreas Funcionales que se constituirán a partir de la agrupación de distritos de interés comunitario en función de los objetivos que se establezcan en cada caso concreto y que pueden ser estables, permanentes o estratégicas.
Los distritos contarán con una carta de competencias, servicios y funciones determinadas y uniformes, que garantizarán la optimización de los recursos humanos y materiales de los municipios con la finalidad de una mejora en la prestación de servicios a los ciudadanos de manera eficaz y eficiente.
La Junta de Castilla y León pretende que el proceso de implantación de este modelo de Ordenación del Territorio, teniendo en cuenta su especial importancia, no sea unilateral, fruto de la acción de Gobierno, sino un proceso abierto, en el que se busca el consenso y que sea necesariamente participativo. Actualmente se está trabajando en el modelo en una Mesa de Ordenación del Territorio (formada por representantes de los principales grupos políticos, por alcaldes de municipios pequeños, medianos y grandes, y por los agentes sociales) y una serie de grupos de trabajo, que aportan perspectiva e ideas. El proceso continúa abierto.
Con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, en especial en las zonas rurales, la Junta plantea un modelo municipal eficaz, encaminado a fortalecer el municipalismo, a través de agrupar recursos y medios con el fin de garantizar una prestación eficiente de los servicios públicos desde la colaboración activa entre todas las administraciones y a partir de la asociación voluntaria en los denominados distritos de interés comunitario.
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