Salamanca ofrece la posibilidad desde hace años de disfrutar de sus Caminos de Arte en la Naturaleza, senderos circulares en distintos puntos de la provincia que permiten al visitante hacer suyos parajes silvestres con encanto y, al mismo tiempo, poder acercarse a instalaciones, esculturas y otras propuestas de creadores contrastados o emergentes que van apareciendo a lo largo de la ruta.
A estas propuestas de arte se suma el patrimonio histórico y cultural que atesora la provincia y la idea de la Diputación de Salamanca es incorporar otras piezas de nueva creación que se sumen a los reclamos ya existentes.
Para ello, entre otras líneas de trabajo, durante la presentación de la nueva edición de los vigesimocuartos Premios San Marcos de la Universidad, con los que colabora la institución provincial, el diputado de Cultura, David Mingo, anunció una novedad en esa relación entre los jóvenes creadores de la Facultad de Bellas Artes del Estudio salmantino con La Salina.
Concretamente, la Diputación ofrecerá, como novedad en este año, becas de residencia para los ocho premiados en cada una de las categorías, que disfrutarán de una estancia en la primera quincena de julio en San Esteban de la Sierra para que puedan llevar a cabo proyectos creativos no efímeros.
Respeto a los Caminos de Arte en la Naturaleza, independientes a estas nuevas becas pero que también van en la línea de conjugar nuevas creaciones con el patrimonio natural, ya permiten ver obras por entornos tan reconocidos como Miranda del Castañar, Villanueva del Conde, Sequeros, Casas del Conde, San Martín del Castañar, La Alberca, Monforte de la Sierra o Mogarraz.
Precisamente, en este última localidad -Mogarraz-, desde hace unos años luce una curiosa iniciativa que invita a pasear por sus calles, son retratos en gran formato elaborados por el consagrado artista y profesor Florencio Maíllo, con imágenes de vecinos del municipio que aúnan tradición y arte en las fachadas de las casas.