La magistrada del Juzgado de lo Penal número 2 de Salamanca ha absuelto al varón de 72 años acusado de cometer un presunto delito de homicidio imprudente, después de que atropellara mortalmente a un operario de la grúa en 2017 en Golpejas.
La sentencia, a la que ha tenido acceso SALAMANCA24HORAS, considera probado que el fatal accidente es "consecuencia de una concatenación de fatales circunstancias". Así, la grúa, debido a la estrechez de la vía, tuvo que invadir parte de la calzada, según constata el informe técnico. En segundo lugar, al haber ya retirado el coche averiado, el operario de la grúa indicó al conductor que le había llamado para la asistencia en carretera que retirara los triángulos de preseñalización de peligro u obstáculo en la calzada; como así declaró el conductor del vehículo averiado.
En tercer lugar, ya retirados los triángulos, el gruista se situó en la calzada junto a la plataforma, fijando la sujeción del vehículo averiado, colocándose agachado y en una zona de penumbra, producida por el sol y por la propia grúa. Por último, en el momento en que el vehículo conducido por el acusado tuvo que rebasar el vehículo grúa, por el carril contrario de frente, venía otro vehículo, al que, en el momento de la colisión lateral y atropello, le impactan restos del coche del acusado. Y que el conductor de dicho vehículo tampoco vio al operario de la grúa.
La sentencia recoge también que el tramo de la vía era recto, pero en el sentido de la marcha del vehículo conducido por el acusado existía un pequeño cambio de rasante, que finalizaba a unos 0,97 metros del escenario del siniestro.
El acusado, de 72 años, dio negativo en alcohol y drogas; no circulaba a una velocidad superior a la permitida para ese tramo de la vía; llevaba las gafas reglamentarias y no hacía uso en el momento del impacto de ningún aparato electrónico.