Bernardo Montoya, el detenido por la muerte de la zamorana y exestudiante de la USAL, Laura Luelmo, habría confesado el crimen tras horas de interrogatorio en el Juzgado de Instrucción 1 de Valverde del Camino, según informa El País, pese a que existe el secreto de sumario sobre las actuaciones.
Según estas informaciones, Bernardo Montoya habría comenzado mintiendo a los agentes que le tomaron declaración, manteniendo versiones "imposible" con las que trataba de eludir su responsabilidad en el crimen, como asegura el periódico nacional citando a fuentes del caso.
De hecho, no habría sido hasta esta mañana cuando ha confesado finalmente su implicación pese a que no se conoce todavía qué parte ha reconocido.
La autopsia practicada al cuerpo de Laura Luelmo apunta a que la causa de la muerte fue un traumatismo craneoencefálico provocado por un fuerte golpe en la cabeza. Según fuentes de la investigación consultadas, el fallecimiento se produjo entre el 14 y el 15 de diciembre, por lo que habría estado dos días secuestrada hasta su muerte, según publicaban también diversos medios de tirada nacional.
El informe preliminar de la autopsia se ha practicado en el Instituto de Medicina Legal (IML) de Huelva, a donde se habían trasladado este martes los familiares de la joven. Los investigadores de la Guardia Civil rastrean la zona cercana a El Campillo donde apareció el cuerpo para buscar indicios sobre esta muerte, ya que se baraja la posibilidad de que Laura hubiera sido golpeada con algún objeto contundente.
Su cuerpo fue encontrado el pasado lunes con visibles signos de violencia, así como semidesnudo y entre unas ramas. Tan solo llevaba unos días en El Campillo, lugar donde se ha producido este crimen, parece que por el propio Bernardo Montoya, que también llevaba apenas dos meses en el lugar tras salir de la cárcel por cumplir dos años por robos con fuerza, y contaba con otros antecedentes penales por el asesinato de una mujer, por los que había cumplido 17 años de prisión. De hecho, la propia Laura ya le dijo a su novio que le inquietaba.
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