Desde febrero de este año, la Guardia Civil de Zamora y más concretamente componentes del Equipo Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) en trabajo conjunto con funcionarios del Centro Penitenciario de Topas, detectaron un incremento sustancial e inusual de la presentación, por parte de los internos residentes en este centro penitenciario, de certificados de uniones como parejas de hecho. Con la presentación y aceptación de este tipo de documento se podrian obtener determinados beneficios penitenciarios.
Por este motivo y de manera coordinada entre ambas instituciones, se iniciaron los trámites oportunos para comprobar la validez o posible falsedad de los documentos presentados y aportados por los internos. Para la realización de estas gestiones se contó a su vez con el apoyo de la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León.
La investigación determinó que la mitad de los documentos presentados eran falsificaciones de documentos originales, donde los datos plasmados sobre el papel no correspondían con ninguna pareja de hecho inscrita legalmente en el Registro de Uniones de Hecho de Castilla y León.
Por parte de la Guardia Civil de Zamora se procedió a la investigación de diez personas como supuestos autores de un delito de falsedad documental. De los diez investigados, seis son internos del centro penitencial de Topas.
Esta operación es fruto de la colaboración y coordinación entre Guardia Civil, Instituciones Penitenciarias y Junta de Castilla y León.
Las diligencias que fueron entregadas en el Juzgado de Instrucción de Guardia de Salamanca.
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