Un hombre de 30 años ha sido detenido después de hurtar una guitarra eléctrica valorada en 1.200 euros de una casa en la que previamente había estado bebiendo con el dueño y otros conocidos.
El propietario de la vivienda denunció estos hechos después de una fiesta en su casa el pasado día 16 de octubre, cuando invitó a unos conocidos a su casa. Pese a ello, relató que él se quedó dormido a las 11 horas de la mañana mientras el resto siguió con la fiesta.
Sin embargo, a las 17 horas, cuando se despertó, los jóvenes se habían marchado y se habían llevado la guitarra eléctrica y una memoria. Las gestiones realizadas después permitieron identificar al presunto autor de los hechos, que fue detenido este lunes en las dependencias policiales, aunque ya le había entregado a la víctima lo sustraído.
Tras prestar declaración, fue puesto en libertad, aunque con la obligación de comparecencia ante la autoridad judicial cuando sea requerido.