El herido de bala registrado durante el fin de semana no es un caso aislado en Salamanca y municipios del alfoz durante este año. Así, son al menos seis, pues pueden ser más porque en ocasiones el temor de los vecinos de la zona a represalias les hace no denunciar los hechos ante la Policía Nacional o Guardia Civil.
Estos cruces de disparos se deben principalmente a ajustes de cuentas por asuntos de narcotráfico. En agosto y mayo hubo dos tiroteos y una agresión con arma blanca en Villamayor de Armuña. Ambos sucesos se saldaron con la detención de los presuntos autores, en el primero de ellos además con el hallazgo de droga en un domicilio del barrio Pizarrales de la ciudad.
Entre finales de febrero y comienzos de marzo también hubo otros dos tiroteos intimidatorios. Uno a una vivienda en la calle Maestro Salinas del barrio San José, otro en la plaza principal del Arrabal de Salamanca, en ese caso tras una discusión entre dos grupos.
Y es que estos tiroteos se dirigen a viviendas a coches, como los registrados a finales del año pasado en los barrios Los Alcaldes y Pizarrales. Posteriormente, en enero, hubo más disparos en la plaza de Baleares de este último barrio. Policía Nacional y Guardia Civil han conseguido resolver casi todos estos hechos.